Había muchas ganas en Petrer de recuperar la luz, el color, la magia y la alegría, en definitiva, los Moros y Cristianos. Y no han defraudado. Si el viernes era la Bajada del patrón desde la ermita a la iglesia la que desbordaba las emociones de los vecinos, la Entrada Cristiana celebrada este sábado no ha dejado indiferente a nadie.

Un vendaval de color y emociones

Acompañados por la música, ha abierto el desfile la comparsa Estudiantes, que celebra sus 90 años, seguida de Labradores, Vizcaínos, Marinos, Tercio de Flandes, Berberiscos, Moros Fronterizos, Moros Nuevos, Moros Beduinos y Moros Viejos. Y es que dos años sin celebrar las fiestas son demasiados para los petrerenses, que han disfrutado con el vendaval de luz y color.

Un vendaval de color y emociones

Por la tarde, se ha celebrado la procesión por las calles del municipio con asistencia de todas las comparsas.

La jornada del domingo arrancó con el desfile de honor y la misa en honor a San Bonifacio en el templo parroquial. Por la tarde es el turno de la Entrada Mora, con el siguiente orden: Berberiscos, Moros Fronterizos, Moros Nuevos, Moros Beduinos, Moros Viejos, Estudiantes, Labradores, Vizcaínos, Marinos y Tercio de Flandes.