La manifestación convocada por la Plataforma Stop Plan Solar Vinalopó en Salinas ha sido calificada por los organizadores como un "éxito" tras conseguir reunir el pasado domingo a 250 personas procedentes de diferentes municipios de la comarca del Medio Vinalopó.
"Demuestra que el pueblo está en contra de las macroplantas fotovoltaicas por su impacto dañino en el medio ambiente, el paisaje y la agricultura". En estos términos se ha pronunciado el portavoz del colectivo, Antonio Martínez, que también ha anunciado que las próximas acciones irán encaminadas a visitar los "despachos políticos" para recabar el apoyo de las diferentes Administraciones Públicas.
"Demandamos a los Ayuntamientos, a la Diputación, al Consell y al Gobierno de España que escuchen a la ciudadanía, que hagan públicas sus gestiones con estas empresas desde hace dos años, que paralicen totalmente los permisos y compatibilidades a todas estas plantas solares y que recuerden que representan a toda la población. Fueron votados para servir al pueblo y no para desoír sus preocupaciones y negociar con nuestro paisaje y nuestra forma de vida", ha subrayado José Antonio Mataix, portavoz de la Plataforma en Salinas.
A continuación reproducimos textualmente el manifiesto elaborado por Stop Plan Solar Vinalopó y la Asociación de Vecinos de Salinas, que fue leído al concluir la manifestación junto a la Pared Civil.
DECIMOS NO A LAS MACROPLANTAS SOLARES Y RECHAZAMOS ESTE NUEVO MODELO ESPECULATIVO Y DEPREDADOR DEL TERRITORIO
Multitud de proyectos de macro centrales solares están en trámite de instalación en las
comarcas del Vinalopó, con una superficie de miles de hectáreas, y más de 100 kilómetros de
líneas y torres de alta tensión, todo ello en terreno agrícola y forestal, incluso en zonas
protegidas como las faldas de la Sierra de Salinas y los alrededores de su Laguna o el pantano
de Elda y la Serra del Cavall en Petrer limitando directamente con espacios de la Red Natura
2000. (Ver Imagen 1)
De toda esta avalancha de macroplantas que planean asentarse en nuestro entorno es,
sin duda, Salinas, NUESTRO PUEBLO, el que está más amenazado. Con un término municipal
de 6.170 hectáreas, en la actualidad existen al menos 5 proyectos planeados en su término con
una ocupación total de 1.300 hectáreas. De estos proyectos, únicamente tres están en fase de
exposición pública y son los que pretenden ubicarse en la zona del Alto Don Pedro (zona de
alto valor ambiental donde se practican deportes montaña, senderismo y escalada), Castillejos
y el Cabezo (por dónde recientemente se ha realizado la tradicional caminata de montaña de la
Romería de San Isidro) y la Sierra de la Umbría (bordeando la laguna de Salinas). Estos tres
proyectos suman un total de 440 hectáreas, el equivalente a más de 500 campos de fútbol. El
resto de los proyectos están en una fase más inicial y de ellos los vecinos NOS ESTAMOS
ENTERANDO por el visor GVA.
En el reciente DECRETO LEY 1/2022, la Generalitat pone el límite del 3% de suelo
no urbano común para la instalación de estas macroplantas. Si tenemos en cuenta este límite,
la desproporción del caso de Salinas insulta nuestra inteligencia: ya que de las 6.170 hectáreas
de término municipal, únicamente cuenta con unas 3.000 hectáreas de suelo no urbano común
(quitando el suelo urbano y todo el territorio protegido de Sierra y Laguna), por lo tanto, el
límite estaría en unas 90 hectáreas y actualmente ya están en exposición pública macroplantas
solares por 450 hectáreas (con su correspondiente compatibilidad urbanística concedida por
NUESTRO AYUNTAMIENTO) además de otros proyectos hasta las 1.300 hectáreas.
La Plataforma STOP PLAN SOLAR VINALOPÓ junto con la ASOCIACIÓN DE
VECINOS DE SALINAS manifestamos nuestra total oposición con cómo se está tramitando
todos estos proyectos. En particular por parte de los ayuntamientos que, nada han informado a
la población, mientras las propias empresas promotoras han reconocido que llevan más de dos
años tramitando la compatibilidad urbanística con ellos. Este hecho deja en evidencia el
oscurantismo y la nula participación que se le ha dado a la población hasta ahora.
RECHAZAMOS TOTALMENTE ESTOS PROYECTOS POR POR NUESTRO MEDIOAMBIENTE Y PAISAJE:
-Devasta la naturaleza y la biodiversidad, tanto en el lugar donde se instalan las placas como
por dónde pasará el kilométrico tendido de alta tensión y sus torres.
- Genera efectos dañinos en flora y fauna.
-Deforesta, tala árboles y erosiona el terreno, aumentando el riesgo de incendios.
-Sube las temperaturas medias y cambiará el microclima de Salinas que es una cuenca
endorréica.
-Supone una pérdida total del valor incalculable de nuestro patrimonio paisajístico que se
convertirá en un mar de placas solares.
POR NUESTRA ECONOMÍA Y DESARROLLO SOCIAL:
-Deja inutilizadas las tierras en las que se instalan las placas solares y dónde se instalarán las
torres, incluso después de desmantelar las placas.
-Desvaloriza los terrenos, fincas y casas aledañas, devaluando el valor de tode el pueblo.
- La producción agrícola se ve enormemente afectada, así como la producción de miel.
-El deterioro paisajístico por el enorme tamaño de las plantas y su horrible diseño afectarán
directamente a cualquier posibilidad de desarrollo del turismo rural.
-Salinas perderá su mayor potencial de desarrollo económico: su patrimonio natural y
cultural.
POR NUESTRA SALUD Y CALIDAD DE VIDA:
- La gran extensión de los proyectos subirá la temperatura media de Salinas varios grados.
- Las líneas de alta tensión y las torres emiten vibraciones.
- Investigaciones científicas vinculan las torres con enfermedades como el cáncer, la
leucemia infantil y complicaciones en embarazos.
- Genera contaminación electromagnética, visual y acústica.
- Se nos arrebata parte de nuestro modo de vida, pasear por las faldas de los montes y
disfrutar de nuestro aire y nuestro paisaje.
“¿Qué personas van a tener interés en visitar los parajes de Salinas invadidos de placas
solares? ¿Quiénes vendrán a escalar al Alto Don Pedro? ¿Cómo va a funcionar un posible
alojamiento en la Casa Calpena rodeada de un mar de placas solares?”
Todos estos daños no dejarán ningún beneficio a la población local ya que son
proyectos gestionados por grandes empresas detrás de las que hay fondos de inversión
internacionales que únicamente buscan hacer negocio expoliando y sacrificando nuestro
territorio. Ese territorio que es también nuestra memoria, nuestro modo de vida y que forma
parte de nuestras tradiciones y riqueza como pueblo.
Estamos a favor de las energías renovables y de un modelo de desarrollo sostenible
respetuoso con el medio ambiente y con el patrimonio natural y cultural de la zona. Abogamos
por un modelo de energía solar distribuida o fragmentada, fomentando el autoconsumo y las
comunidades energéticas (pequeña escala) y buscando ubicaciones racionales de las placas
como son las cubiertas de edificios, suelo industrial, etc.
Demandamos a los ayuntamientos que escuchen a la ciudadanía, que hagan públicas
sus gestiones con estas empresas desde hace dos años, que paralicen TOTALMENTE los
permisos y compatibilidades A TODOS ESTOS PROYECTOS y que recuerden que
representan a TODA LA POBLACIÓN y fueron votados para servir al pueblo y no para desoír
sus preocupaciones y negociar con NUESTRO PAISAJE Y NUESTRA FORMA DE VIDA.
