La Junta de Gobierno Local de Novelda ha aprobado el Plan de Seguridad y Salud, paso previo al inicio de las obras de rehabilitación y adecuación de la ermita de Sant Felip, unos trabajos que permitirán convertir el interior del inmueble -que fue anteriormente mezquita- en una sala polivalente para usos culturales.

Las obras, tras más de doce años de una primera actuación que posibilitó la restauración del patio exterior de la ermita y su conversión en espacio cultural, permitirán recuperar y convertir en un espacio visitable el interior de la ermita de Sant Felip, uno de los principales enclaves patrimonial, histórico y arqueológico de la ciudad.

La adecuación proyectada contempla, entre otras actuaciones, la instalación de suelo de metacrilato sobre los yacimientos arqueológicos localizados en el subsuelo y la conversión del recinto en espacio museístico y cultural polivalente.

El alcalde de Novelda, Fran Martínez, ha señalado, tras la celebración de la última Junta de Gobierno Local, que se ha aprobado pedir una subvención a Presidencia de la Generalitat Valenciana, que se suma a las líneas de financiación solicitadas a la Diputación Provincial de Alicante y la propia Generalitat Valenciana, “para sufragar unas obras que le darán una gran visibilidad a un espacio histórico clave para Novelda, creando una nueva sala multiusos centrada en el uso cultural”.

Hermanos de la Sangre de Cristo

Adquirida por el Ayuntamiento de Novelda al Obispado de Orihuela-Alicante en el año 2008 la Ermita de Sant Felip se levanta, según indican los restos arqueológicos localizados en las excavaciones realizadas hace casi 20 años, sobre o en las proximidades de la que fue la principal mezquita islámica de Novelda.

Las diferentes campañas de investigación que se han llevado a cabo en el edificio han permitido la localización de restos con una secuencia cronológica que abarca desde el Neolítico (hace 7.000 años), hasta la actualidad, pasando por la época islámica de la que data la mezquita.

Asimismo el yacimiento arqueológico también deja al descubierto la bajada a la antigua cripta donde se enterraban los cuerpos de los miembros de los Hermanos de la Sangre de Cristo, la hermandad laico religiosa ortodoxa que regentó la ermita durante el siglo XVIII.

Tras y como este diario publicó en 2010, la ermita de Sant Felip de Novelda fue reconstruida en el siglo XVIII por una comunidad religiosa sobre las ruinas de la antigua parroquia de la Natividad de la Virgen, la primera iglesia cristiana erigida en la ciudad allá por el siglo XIV, en plena Reconquista Cristiana. Pero este templo se construyó sobre la estructura de lo que muchos años antes, entre los siglos XI y XII, fue la principal mezquita islámica de Novelda. De todo ello se tenía constancia documental pero en el año 2010 se pudo comprobar sobre el terreno. O mejor dicho, debajo del terreno. Algo que quedó suficientemente demostrado con las excavaciones que el Ayuntamiento llevó a cabo dentro del proceso de restauración y rehabilitación de este inmueble, que desde el año 2008 es de propiedad municipal ya que el equipo de gobierno de PSOE-Compromís decidió comprarlo a la Diócesis de Orihuela-Alicante para convertirlo en un espacio público multicultural.

Cinco enterramientos

Fue el departamento municipal de Arqueología, que entonces dirigía Concha Navarro, el que descubrió debajo de una capilla lateral de la ermita parte de una necrópolis islámica con cinco enterramientos, cuatro de ellos pertenecientes a niños y uno a adulto, todos ellos en posición de cúbito lateral con el cráneo mirando hacia el Este. Este hallazgo, junto a los restos cerámicos de decoración geométrica y las inscripciones árabes del Corán encontrados en el patio del edificio durante una anterior campaña arqueológica, evidenciaron para los expertos que la antigua mezquita de Novelda y la necrópolis islámica ocupaban aproximadamente el mismo lugar que actualmente ocupa la ermita de Sant Felip.