Miles de eldenses, niños y mayores, se han vuelto a reencontrar hoy con uno de los actos lúdicos más participativos de las Fiestas Mayores: Correr la Traca en honor a los Santos Patronos. Un acto que cumplía en este día el veinte aniversario tras su última recuperación aunque solo se han podido celebrar 18 ediciones por la suspensión obligada del covid. Con el recuerdo todavía presente de dos años de pandemia ha sido un momento muy especial para los eldenses volver a sentir, durante poco más de tres minutos, la adrenalina de escuchar las explosiones de los petardos aproximarse por encima de sus cabezas. La participación ha sido multitudinaria y entre los corredores muchos jóvenes y niños.

Muchos corredores se protegen con paraguas y gorros para protegerse de los petardos. Áxel Álvarez

En los últimos años este festejo popular se ha convertido en una de las citas ineludibles, para familias enteras, dentro del programa de fiestas de la Cofradía de los Santos Patronos. Algunos han corrido con paraguas en mano y la pañoleta al cuello, otros con gorras y el resto se ha resguardado en las calles adyacentes para ver a la multitud cubrir entre risas un recorrido de kilómetro y medio de traca, desde la plaza de la Constitución hasta la plaza Castelar donde una mascletá ha puesto el colofón.

La suelta de globos se celebra en la Plaza Mayor de Elda al finalizar la traca. Áxel Álvarez

Es uno de los actos más multitudinarios de las fiestas de los Santos Patronos, precedido por la Misa Mayor, que este año ha estado dedicada a las madres, y seguido del tradicional "mezclaico" en el aperitivo, el repertorio de canciones populares y la suelta de los enormes globos en una plaza Mayor que ha contado, por vez primera, con la presencia de los Gigantes y Cabezudos. Y antes de la solemne procesión de la Virgen de la Salud tocaba reunirse con la familia para comer el típico plato de relleno en el día de la patrona. Era el día grande de la patrona y la procesión volvió a emocionar a las miles de personas que se congregaron en las calles para ver pasar la imagen iluminada a hombros de las costaleras y costaleros. 

La Virgen de la Salud, con la iglesia de Santa Ana al fondo, al comienzo de la procesión de este jueves. Áxel Álvarez

Con los versos de Hilarión Eslava todavía presentes en los fieles que acudieron a la Santa Misa, salió la talla del templo entre aplausos, cariño y admiración. Se iniciaba entonces la procesión de «La Salud» con su habitual escenografía: la maqueta del barco San Eduardo en el que llegaron las imágenes a Elda, los peregrinos y los niños representando a los ángeles. Un momento que el poeta más popular de Elda, El Seráfico, ya inmortalizó en una de las obras que dedicó a su pueblo: «Elda, feliz y dichosa,/ eternamente serás, /pues cada paso que das/ te haces más laboriosa. /Toda la prole reposa/ sin la menor inquietud, /la senda de la virtud. /No abandones, patria mía, /porque en ella te guía /la Virgen de la Salud».

El tradicional "mezclaico" de aperitivo. Áxel Álvarez

Precisamente este año el Ayuntamiento de Elda ha editado un cancionero que recopila los temas populares eldenses que recuperó el grupo de montañeros Los Caracoles, y que tradicionalmente se interpretan en las Fiestas Mayores durante la suelta de globos. En total se han impreso 2.500 ejemplares, que se han repartido de manera gratuita, para salvaguardar el patrimonio inmaterial de Elda.

El alcalde Rubén Alfaro con el grupo Los Caracoles cantando los típicos temas de las Fiestas Mayores de Elda. Áxel Álvarez

La ciudad sigue hoy de Fiestas Mayores para honrar a su otro patrón, el Cristo del Buen Suceso, que también tendrá su traca y sus globos, las canciones, la Salve Grande, la Santa Misa, la Procesión y por supuesto el "mezclaico", que se compone de vermut rojo, picón y un buen chorro de sifón.

Una Traca con mucha historia

El festejo de la Traca ha ido apareciendo y desapareciendo en Elda hasta que en el año 2002 se recuperó oficialmente para quedarse.

Sus orígenes se remontan a las primeras décadas del pasado siglo XX, constando dentro de los programas oficiales de fiestas de los años 20 y 30 como "traca detonante". Perdiéndose, pasados los años, fue en 1995 cuando el entonces alcalde Camilo Valor hizo el intento de volver a recuperar la Traca en las Fiestas Mayores, si bien no terminó de "calar" y ya el siguiente año volvió a quedar en el olvido. Aunque no para todos. Decididos a que el acto lúdico no muriera, la escuadra de los Sirokos organizó su propia Traca, de apenas 50 metros. Un "acto entre amigos" en el que en 1996 comenzaron participando apenas cinco o seis personas y que, año a año, fue ganando popularidad, según recuerda Paco "El Papero", uno de aquellos sirokos que se encargaron de "velar" por la supervivencia de la Traca y que este año no faltará a la cita.

Contagiándose de la diversión de la escuadra de Sirokos, año a año fueron siendo más los que comenzaron a sumarse a correr la modesta traca, que fue ganando adeptos hasta que, de la mano de su creciente popularidad, el Ayuntamiento, con Juan Pascual Azorín, y la Cofradía de los Santos Patronos volvieran a apostar en 2002 por su recuperación oficial. Y ya van veinte años que solo se han visto interrumpidos por los dos años de la pandemia.