La subida del precio de la pólvora vuelve a amenazar el tradicional festejo de la arcabucería
La Mayordomía de San Blas de Sax destina 6.000€ para abaratar el coste del explosivo y evitar que la participación siga desplomándose en las fiestas de Moros y Cristianos
La pólvora negra que se utiliza en los actos de arcabucería de las fiestas de Moros y Cristianos ha adquirido un precio prohibitivo con la nueva subida.
Los festeros de Sax, la población que abre el calendario de esta celebración en la provincia de Alicante, han tenido que pagar 42 euros por kilo. Son cuatro euros más de los que, por ejemplo, los festeros de las comparsas del barrio alicantino de San Blas abonaron en julio pasado. Pero en comparación con lo que los tiradores sajeños pagaron en 2018, el precio se ha incrementado en 12,5 euros por kilo de pólvora. Lo dicho, un precio prohibitivo.
Pero no es el único desembolso extra al que deben hacer frente los arcabuceros. Los pistones cuestan 16 euros y la cantimplora dosificadora 9 euros. Además, quienes alquilan los arcabuces y trabucos deben pagar por participar en tres actos de fuego 30 euros si es un arma de avancarga normal. Pero el precio sube a 50 euros si es especial.
Ante este complicado panorama, al que se suman las trabas administrativas y legales y los episodios puntuales de desabastecimiento de los últimos años, los festejos de arcabucería pierden cada vez más adeptos en todas las poblaciones, amenazando una tradición enraizada en el origen y la historia de las fiestas de Moros y Cristianos.
Frente a este panorama la Mayordomía de San Blas de Sax ha destinado 6.000 euros de su presupuesto anual para abaratar el precio. El objetivo es evitar que la participación siga reduciéndose como viene ocurriendo en los últimos años. La ayuda por festero dependen del número de arcabuceros pero en estas fiestas va a suponer 12,50 euros por kilo.
Cabe puntualizar al respecto que la villa sajeña se ha caracterizado desde los años 70 por ser muy participativa en los actos de fuego. Pero la tendencia de los últimos quince años va en caída progresiva. De hecho, fueron 315 festeros -Cristianos, Garibaldinos, Alagoneses, Caballeros de Cardona, Árabes Emires, Turcos, Marruecos y Moros- los que hicieron rugir sus arcabuces en el año 2007 durante las procesiones de la Candelaria y de la Subida y Bajada del Santo. Pues bien, en este año 2023 la cifra se ha reducido a 250.
El presidente de la Mayordomía de San Blas de Sax, Francisco Sánchez Alarcón, admite que "el actual precio de la pólvora supone una traba enorme para este tipo de festejos, pero también las organizaciones debemos tener sensibilidad y apoyar a los festeros para mantener la tradición".
La pregunta
Los expertos en el uso de la pólvora festero consultados por este diario en diferentes localidades de la provincia coinciden en señalar que el verdadero problema reside en que una sola empresa tiene la exclusividad en la producción, distribución y comercialización de explosivos. "Y lo lamentable -subraya Francisco Sánchez- es que está vendiendo pólvora negra fabricada en Alemania en el año 2020 con precios de 2023". Admite que la calidad es buena pero se pregunta: ¿por qué no se permite su fabricación en los talleres pirotécnicos como se hacía antes del año 2004?".
Sobre esta cuestión también ha consultado este diario a la presidenta de la UNDEF pero Pepa Prats no ha respondido.
29,5 euros por kilo en 2018
Curiosamente en 2017 este diario ya avanzó que disparar en las fiestas de Moros y Cristianos de Sax saldría un 20% más caro. El entonces presidente de la Mayordomía de San Blas, Pascual Chico, informó de que el precio por kilo de pólvora ascendería a 29,5 euros cuando el año anterior se habían pagado 24,5 euros. Sobre los motivos de este incremento dijo que se debían por un lado a la subida del coste en origen por parte del fabricante que, además, según explicó Chico, es el único de España que se dedica a la pólvora para festejos y que ese año lo estableció en 19,5 euros. Por otro lado atribuyó el encarecimiento del explosivo a la subida del IVA del 18 al 21%, que comenzó a aplicarse en 2018. Y el tercer motivo del incremento del coste de la pólvora negra, un problema que sigue agudizándose cinco años después, lo atribuyó al descenso de tiradores.
Las fiestas de Moros y Cristianos de Sax son las primeras del año. Pero el problema afecta a todas por igual y está en juego el tradicional festejo de la arcabucería.
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