El alcalde de fiestas de Sax que nunca fue

La pandemia impidió a Gabriel Bañón Ganga ejercer el cargo tras su elección y Daniel Gil Giménez ha asumido la responsabilidad este año

El alcalde de fiestas de 2023, Daniel Gil, y Gabriel Bañón, histórico delegado de la comparsa de Alagoneses.

El alcalde de fiestas de 2023, Daniel Gil, y Gabriel Bañón, histórico delegado de la comparsa de Alagoneses. / J.C.P.G.

Pérez Gil

Pérez Gil

Gabriel Bañón Ganga pasará a la historia de los Moros y Cristianos de Sax por ser el alcalde de las no fiestas de San Blas.

Pocos lo saben pero Gabriel, histórico delegado de la comparsa de Alagoneses, fue elegido alcalde de fiestas, que es el máximo cargo supervisor del correcto desarrollo de todos los festejos del 1 al 5 de febrero.

Sin embargo la irrupción de la pandemia del covid-19, con la consiguiente suspensión de las fiestas de San Blas de 2021 y 2022, le impidió desarrollar su cometido.

Tras un paréntesis de dos años, y sin haber podido ejercer como alcalde de fiestas, ha dado por cerrada esa etapa de su vida festera, de tal modo que ha sido Daniel Gil Giménez el festero que ha asumido el cargo en la actual celebración de 2023.

El mural medieval

El episodio del acalde de los Moros y Cristianos que nunca fue es una curiosidad más de la celebración de San Blas, como lo es el "photocall" en el que se ha convertido para los festeros el mural que recrea la villa medieval de Sax.

La espectacular estampa urbana fue pintada por el artista eldense Zetika en el casco antiguo en las vísperas de las fiestas. Concretamente en el jardín Fernando Tomás Maestre Gil y junto al mural del científico Alberto Sols.

Festeros de la comparsa de Alagoneses en el mural de la plaza Biólogo Fernando Maestre Gil.

Festeros de la comparsa de Alagoneses en el mural de la plaza Biólogo Fernando Maestre Gil. / INFORMACIÓN

El mural de Alberto Sols y de la villa medieval en la plaza Fernando Tomás Maestre Gil con el castillo iluminado.

El mural de Alberto Sols y de la villa medieval en la plaza Fernando Tomás Maestre Gil con el castillo iluminado. / INFORMACIÓN

La composición representa la actividad de un zoco árabe, así como la arquitectura almohade del minarete. También se observa que la torre almohade es como tres veces más grande que la actual. En definitiva, un escenario inmejorable para que las escuadras festeras, peñas de amigos, sajeños y visitantes inmortalicen un instante que ya no volverá. Tempus fugit.