La primera voz que se escuchó en el Teatro Castelar de Elda tras su reapertura en 1999 fue la de Ana María Sánchez Navarro. Y en el mismo templo de la cultura eldense la prestigiosa soprano ha sido nombrada un cuarto de siglo después Hija Predilecta a título póstumo.
"Los ecos de su voz resonarán entre estas paredes para siempre, pero el nombre de Ana María Sánchez también quedará escrito en el mundo de la música, en el corazón de cada uno de los eldenses y, desde hoy, en la historia de la ciudad de Elda que la vio nacer. Porque nuestra ciudad siempre se ha enorgullecido de tenerla como vecina, siempre le ha guardado un tremendo honor, un profundo afecto y un enorme respeto por llevar el nombre de Elda por todo el mundo", ha destacado el alcalde Rubén Alfaro durante el acto solemnemente emotivo celebrado este viernes 18 de marzo de 2023.
Familiares y amigos de Ana María Sánchez, miembros de la Corporación local, representantes de los colectivos de la ciudad así como la dirección, el claustro y las promociones de alumnos y alumnas de Conservatorio que lleva el nombre, han compartido su orgullo por la ciudad y por sus gentes. La cantante recorrió los escenarios de España y de todo el mundo, cosechando triunfos y elogios, pero de todos esos aplausos, como dijo ella, los que más le gustaban eran los que le brindaban sus paisanos.
"Por eso hoy, querida Ana María, desde tu escenario del cielo vuelves a recibir los aplausos de tu querida Elda, que se ha reunido para celebrar la suerte que hemos tenido todas y todos de tenerte y de quererte", indicó Alfaro mientras el público lo interrumpía con un prolongado aplauso en recuerdo de la segunda eldense que alcanza el título honorífico que la escritora Elia Barceló "estrenó" en julio de 2021.
La proyección de un audiovisual, con testimonios llenos de cariño sobre su dimensión profesional y personal, también mostraron el orgullo y el cariño del hijo y el viudo de la artista. Miguel Ángel Rubio y José Francisco Rubio lo han vivido como un colofón a la trayectoria de una mujer que "siempre se ha sentido eldense en mayúsculas" y que hubiera disfrutado muchísimo de este acto "porque se lo hace su pueblo".
Pero la fatídica enfermedad le arrebató la vida el 17 de septiembre de 2022 a los 63 años de edad tras una carrera profesional plagada de éxitos.
"Anhelo y añoranza"
"Queridos Pepe y Miguel Ángel, mirad al público que llena este teatro y sentiros muy orgullosos de cómo Elda ha respondido a esta llamada. Sentiros muy orgullosos de este día y de ser los que más habéis podido querer a nuestra Hija Predilecta", añadió el primer edil emocionando a ambos para finalizar su intervención reconociendo "que nunca una palabra puede llenar el vacío que deja una ausencia tan importante como la de una esposa, una madre o una amiga. Tampoco un acto puede borrar el anhelo y la añoranza que sentimos por ella. Este nombramiento sólo puede –y debe– llenarnos enormemente a todos de una cosa: de un tremendo orgullo por Ana María Sánchez Navarro, Hija Predilecta de su querida Ciudad de Elda".
Durante su pregón de las Fiestas Patronales de Elda del año 1998 Ana María Sánchez dijo: "Porque mi canto es de Elda y Elda es mi música. Yo nací de la Elda eterna que ríe y llora con la música y el canto".
Una declaración de principios por el que se ha decidido culminar el acto institucional con un concierto en su memoria a cargo del Coro y Orquesta del Conservatorio de Música Ana María Sánchez dirigido por Pilar Vañó. Y el repertorio, como no podía ser de otra manera, ha estado formado por las obras que marcaron la trayectoria profesional de Ana María Sánchez. Entre ellas Nabucco y La Traviata, de Verdi y Carmen, de Bizet, magistralmente interpretadas por las sopranos Teresa Albero y María Dolores Fito y los tenores Francisco Javier Jiménez y José Carlos Blanes.
Pero antes Miguel Ángel Rubio se ha dirigido al público para mostrar el profundo agradecimiento de su familia a Elda porque su madre sí ha sido profeta en su tierra. Una frase que también plasmó en el libro de honor tras anunciar la creación de la Fundación Ana María Sánchez para conservar su extraordinario legado cultural.
"Aquí fue inmensamente feliz"
“Este título es, sin duda, el que más le habría gustado presenciar, y además en este espacio, el Teatro Castelar, en el que fue inmensamente feliz. Cuando su carrera estaba en auge se pasaba fuera más de la mitad de su tiempo, pero siempre hablaba de Elda como su remanso de paz. Aquí tenía a su familia, a sus amigos y sus raíces, y cuándo le preguntaban porqué no vivía en Madrid o en Barcelona, que era mucho más sencillo para viajar, siempre decía que no cambiaba Elda por nada del mundo”.
El hijo de la artista lírica ha recordado que “en Elda cargaba las pilas física y emocionalmente para soportar el ritmo de su carrera. Lejos del glamour de los escenarios, los triunfos y reconocimientos, la carrera de soprano requiere grandes sacrificios. Quizá por ello mi madre valoraba siempre estar en Elda. Siempre se sintió profeta en su tierra y presumió de ello. Siempre que pudo por su agenda acudió a Santa Ana a cantar a la Virgen de la Salud”.
Miguel Ángel Rubio, quien ha anunciado que la familia trabaja en la creación de una Fundación que llevará el nombre de su madre, ha concluido recordando que “fue una mujer fuerte, luchadora, un ejemplo de cómo afrontar la vida y también la enfermedad. Siempre estuvo arropada y magníficamente atendida en los últimos momentos. Se fue rodeada de sus seres queridos y amparada por la Virgen de la Salud y el Cristo del Buen Suceso. Quiero agradecer a todo el pueblo de Elda este honor y sé que está en presente en el corazón de todos los presentes en este homenaje”.
Ana María Sánchez no volverá a cantar en el Teatro Castelar pero su arte permanecerá, su nombre quedará escrito en el mundo de la música y su vida y trayectoria ya forman parte de la historia de Elda.
Además, tal y como ella acostumbraba a decir durante sus largas giras, siempre le acompañará la luz de este valle y el halo de millones de canciones que habitan en el aire de su pueblo.