Alegres pasodobles para despedir las fiestas en Elda

El emocionante regreso de la imagen de San Antón a su ermita tras la participativa Procesión cierra los cinco días de Moros y Cristianos

Pérez Gil

Pérez Gil

Elda inició sus fiestas de Moros y Cristianos en la tarde del jueves con el pasodoble Idella y las ha finalizado en la noche de este lunes con el pasodoble A San Antón.

El ciclo se ha cerrado tras cinco jornadas en las que el tiempo ha pasado a una velocidad de vértigo para los festeros entre desfiles, alardos, traslados, diana, embajadas, estafetas, acompañamientos y cuartelillos.

En la mañana de ayer sonaron por última vez los 600 arcabuces con los que se han quemado este año 1.000 kilos de pólvora, y en la Embajada Cristiana el Embajador Moro, David Juan, se despidió del cargo que ha ostentado durante siete años ofreciendo extraordinarias representaciones.

Las lágrimas de la abanderada en el fin de fiestas de Elda.

Las lágrimas de la abanderada en el fin de fiestas de Elda. / Áxel Álvarez

Se aproximaba el final y los eldenses salieron a la calle a las seis y media de la tarde para agradecer al patrón de los Moros y Cristianos los días disfrutados. Jornadas vividas en plenitud, armonía y sin lluvias a pesar de las alertas que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) había activado por intensas precipitaciones durante toda la celebración. Tormentas que descargaron con fuerza en municipios cercanos pero pasaron de largo por Elda.

La mirada de admiración y cariño de una festera a San Antón.

La mirada de admiración y cariño de una festera a San Antón. / Áxel Álvarez

La Procesión de San Antón arrancó participativa y puntual este lunes en una tarde marcada por la emoción.

Los rostros de las festeras y festeros serios y cansados, el cielo azul y las ovaciones del público al paso del patrón con las marchas solemnes de la AMCE Santa Cecilia exaltando el sentimiento de identidad de los eldenses. 

Con los brazos cruzados y a paso lento las escuadras de las nueve comparsas iniciaron el penúltimo festejo. Desde la iglesia de Santa Ana hasta la plaza del Ayuntamiento tras recorrer las calles San Francisco, Pedrito Rico, Antonino Vera, Elia Barceló, Dahellos, Ortega y Gasset, Nueva y Colón.

Las capitanías despidiéndose del patrón de las fiestas de Moros y Cristianos de Elda.

Las capitanías despidiéndose del patrón de las fiestas de Moros y Cristianos de Elda. / Áxel Álvarez

Pero la solemnidad de la procesión se convirtió a las diez de la noche en alegre despedida cuando la imagen del anacoreta llegó al castillo de Embajadas y tomó camino de la ermita. Comenzaba el Traslado del Santo. Con animados pasodobles llegó San Antón a su «casa» media hora más tarde, de donde volverá a salir en enero para festejar la Media Fiesta.

El Embajador Moro limpiándose las lágrimas en presencia del Embajador Cristiano.

El Embajador Moro limpiándose las lágrimas en presencia del Embajador Cristiano. / Áxel Álvarez

Uniendo sus voces los festeros y el público para entonar el pasodoble en honor al patrón y con la «campanica» del templo enloquecida, los Contrabandistas -festeros y festeras- dieron a la venerada talla las tradicionales vueltas antes de la alegre y triste despedida.

Los porteadores de San Antón, este año los festeros de la comparsas de Contrabandistas, abrazándose tras dejar al patrón en su ermita.

Los porteadores de San Antón, este año los festeros de la comparsa de Contrabandistas, abrazándose tras cumplir el ritual de dejar al patrón en su ermita. / Áxel Álvarez

Se sucedían entonces los abrazos, los besos y los llantos de felicidad por lo que está por llegar y de temprana añoranza por lo que ya se ha acabado. Y los más emocionados: abanderadas y capitanes y los Embajadores Moro y Cristiano en una montaña rusa de sentimientos enfrentados.

Las lágrimas de emoción de una festera en el fin de la celebración.

Las lágrimas de emoción de una festera en el fin de la celebración. / Áxel Álvarez

Y cuando San Antón entró en su ermita una gran alborada pirotécnica dio oficialmente por finalizadas las fiestas de Moros y Cristianos de Elda de 2023, dando comienzo en ese mismo instante las fiestas de 2024. Principio y fin para cerrar el ciclo de unas fiestas extraordinarias