Puertas al monte en la provincia de Alicante para los vehículos a motor

Aumentan los daños medioambientales y las quejas de senderistas, ciclistas y corredores por la circulación de motos y todoterrenos en pistas forestales y caminos protegidos de montaña

Dos motoristas circulando por un camino forestal de Novelda.

Dos motoristas circulando por un camino forestal de Novelda. / INFORMACIÓN

Pérez Gil

Pérez Gil

La circulación de motocicletas y vehículos todoterreno por senderos, zonas forestales y caminos protegidos de montaña ha aumentado de forma apreciable durante el último año en los enclaves naturales de la provincia de Alicante. Especialmente en las comarcas de l'Alacantí, el Alto y Medio Vinalopó y la Marina Baixa.

Cuando esta práctica deportiva no se desarrolla en los lugares adecuados genera daños en el medioambiente, altera la vida de la fauna salvaje, deteriora el firme de las pistas y sendas forestales, potencia la erosión, aumenta el riesgo de incendio forestal y supone un peligro para el paso de senderistas, corredores y ciclistas de montaña. De hecho, durante los últimos meses se han sucedido varios percances entre excursionistas y motoristas de enduro. Situaciones de riegos generadas por la presencia de vehículos a motor no autorizados en pistas y sendas forestales, principalmente motocicletas, que han provocado muchas quejas de ecologistas y de deportistas.

Por eso advierten del grave riesgo que corren los usuarios de los parajes medioambientales que se acercan de una manera respetuosa a los campos y montes de la provincia para disfrutar de sus paisajes.

Cadenas y barreras

Para evitar este tipo de situaciones el Ayuntamiento de Novelda ha tomado medidas esta misma semana. Los responsables municipales quieren evitar el paso de vehículos a motor por el vial de servicio del Paraje Natural Municipal Clots de la Sal i Serra de la Mola que recorre el tramo del río Vinalopó. Un espacio que está catalogado como pista forestal y en el que la concejalía de Medio Ambiente acaba de instalar cuatro accesos de control con cadenas, a los que sumará en breve dos barreras.

Tras detectarse el mal uso del vial de servicio del río, zona inundable catalogada como cauce público y pista forestal, con vertidos de residuos incontrolados o punto de acceso de motocicletas y vehículos todoterreno, el departamento municipal de Medio Ambiente, cumpliendo con las directrices de la recientemente promulgada Ordenanza de Uso Público del Paraje Natural Municipal Clots de la Sal i Serra de la Mola y de la propia normativa de circulación de vehículos a motor que impide su paso por zonas forestales, ha procedido al corte del camino para potenciar el tránsito senderista y ciclista. A partir de ahora solo se permite el uso de vehículos para labores de vigilancia y mantenimiento del espacio y de los canales de riego.

Medidas de carácter preventivo que el Ayuntamiento complementará con una mayor vigilancia de la Policía Local y la colaboración del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.

A este respecto cabe hacer mención a las tareas de vigilancia que las patrullas del Seprona realizan de forma periódica en los parajes naturales más concurridos por los pilotos de enduro y conductores de quad y todoterrenos. A pesar del esfuerzo se necesitan muchos más medios humanos y técnicos para poder abarca el amplio espacio forestal de la provincia de Alicante.

Multas de hasta 1.200 euros

Los autores de este tipo de infracciones se enfrentan a sanciones administrativas que llevan aparejadas multas de hasta 600 euros. Así lo establece el Decreto 8/2008 del 25 de enero del Consell por el que se regula la circulación de vehículos en los terrenos forestales de la Comunidad Valenciana. Una sanción a la que en algunos casos se suman otros 600 euros cuando se trata de motoristas que, además de haber accedido a caminos no autorizados, circulan con la rueda matriz de motocross, lo que implica una mayor degradación del medioambiente y daña los senderos al crear surcos en la tierra y levantar piedras que dificultan el paso de los senderistas.

Sin embargo los expertos consultados consideran que el problema es de ámbito nacional y se debe a la falta de una legislación clara y contundente en este ámbito. Y a este problema se añade la ausencia de campañas de sensibilización social, un mayor control por parte de las autoridades y más información a los usuarios de los enclaves naturales sobre las vías, senderos, caminos o pistas forestales autorizadas o desautorizadas en función de la actividad que vayan a realizar.

Se quejan los ecologistas de que los motoristas se amparan en el anonimato al llevar el rostro cubierto con el casco y las gafas, y el resto del cuerpo con los monos de protección y guantes. En algunos casos también se han percatado de que circulan con las matrículas tapadas o modificadas para evitar ser identificados.

Es más, hay empresas europeas que ofrecen excursiones en 4×4 por las montañas alicantinas y al terminar la "aventura" los conductores regresan en sus vehículos a sus países de origen.

Por su parte los amantes de las motos de enduro y de los todoterreno recuerdan que "el monte es de todos" y piden que no se "generalice" ni se les "criminalice". Aclaran que también ellos practican el deporte que les gusta, denuncian la falta de información por parte de la Administración sobre las rutas prohibidas y ponen a Cataluña como ejemplo. Entre otros motivos porque dispone de una red de pistas forestales específicas para circular con vehículos a motor.