Redoblan la vigilancia ante la oleada de robos en zonas rurales de Sax

El Ayuntamiento pide a los vecinos que denuncien y tomen nota de las matrículas para facilitar el trabajo de las autoridades

Los vecinos colocan pegatinas para que los ladrones sepan que están en contacto.

Los vecinos colocan pegatinas para que los ladrones sepan que están en contacto. / INFORMACIÓN

Sara Rodríguez

Sara Rodríguez

La Policía Local de Sax ha intensificado las labores de vigilancia ante el aumento de robos en viviendas de las zonas rurales del municipio. Así lo confirmaron ayer la alcaldesa de Sax, Laura Estevan, y el concejal de Seguridad, Juan Rico, tras una reunión que este último mantuvo con algunos de los vecinos afectados. Durante el encuentro, se informó a los residentes sobre las medidas adoptadas para mitigar el temor y la inseguridad generados por los robos, que han venido ocurriendo desde hace aproximadamente un año en una zona habitada por unas 200 personas, entre casas de campo y chalés.

Desde la Concejalía de Seguridad se aseguró que la Policía Local ha incrementado significativamente su presencia en la zona, pasando de realizar patrullas «cada dos días» a hacerlo «diariamente, tanto por la tarde como por la noche». Este esfuerzo ya ha dado frutos: recientemente, la Policía Local interceptó a una persona que estaba robando cableado en la zona rural, quien posteriormente fue arrestada por la Guardia Civil, según explicó el concejal Rico.

La alcaldesa Estevan subrayó la importancia de que los vecinos denuncien cualquier actividad sospechosa y tomen nota de las matrículas de vehículos desconocidos para facilitar el trabajo de las autoridades. Además, destacó que la Policía Local y la Guardia Civil están trabajando «de forma coordinada» para reforzar la vigilancia en la zona. En respuesta a la situación de inseguridad, los vecinos han organizado un grupo de WhatsApp para compartir información sobre personas o vehículos sospechosos. También han colocado carteles en sus propiedades advirtiendo sobre esta red vecinal de vigilancia.

Los robos comenzaron en 2022 y, pese a los esfuerzos realizados, los autores no han sido plenamente identificados ni detenidos hasta el momento. Sin embargo, las autoridades locales aseguran estar haciendo todo lo posible para resolver la situación.

El temor se ha agudizado desde que a finales del verano la actividad delictiva se intensificó. Una nueva oleada de asaltos a chalés protagonizada posiblemente por la misma banda.

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