Desde 1978 hasta 2016, los dos partidos principales del Congreso, PSOE y PP, han disminuido sustancialmente los votos recibidos durante las elecciones generales españolas creando, en los últimos tiempos, una tendencia a la baja.
El motivo de este descenso es la irrupción en la Cámara baja de dos partidos jóvenes que nacieron con el ánimo de acabar con el bipartidismo y la "vieja política". Se trata de Podemos y Ciudadanos quienes obtuvieron a la vez el respaldo de los ciudadanos y pasaron a ocupar varios escaños en el Congreso en las elecciones de 2015.
Ante la imposibilidad de formar Gobierno tras estos comicios revolucionarios, los españoles volvieron a las urnas sólo seis meses después, en junio de 2016, con la oportunidad de desbloquear la situación política del país. Lo que viene a continuación, es la historia reciente de España: el gobierno de Mariano Rajoy finaliza abruptamente tras la moción de censura liderada por Pedro Sánchez y apoyada por Podemos y fuerzas nacionalistas.
El jefe de los socialistas, al frente del Ejecutivo español desde junio de 2018, ha dirigido el país hasta que, la falta evidente de apoyos y el rechazo a sus presupuestos le abocaron a la convocatoria de elecciones del 28 de abril.
Los resultados se conocerán muy pronto, pero la formación de gobierno se antoja lenta y difícil, y más aún con unas elecciones autonómicas que se celebrarán en un mes vista.