"¿Estamos todos?", la otra mirada del debate electoral de Alicante

Entre nerviosos por enfrentarse al último debate de campaña electoral de Alicante y agotados por la acumulación de actos en una recta final hacia el 28M marcado por la lluvia. De hecho, los candidatos llegaron a INFORMACIÓN bajo los paraguas y mirando al cielo. Sobre todo los representantes de EU-Unidas Podemos y de Vox, que por la tarde tenían en Alicante a sus líderes: a Yolanda Díaz en Las Cigarreras y a Santiago Abascal, frente al Ayuntamiento. 

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Pese a que los días pasan, y también los ataques en busca de los votos de los más indecisos, los candidatos mostraron cordialidad entre ellos, también sus equipos. En los corrillos previos una de las cuestiones más repetidas fue: «Y tú, ¿cómo lo ves?», en alusión a las expectativas para el 28M. Y aunque cada uno barría para casa, hubo coincidencia en que el partido está más abierto de lo previsto, más por errores que por aciertos. «¿Estamos todos?», se escuchó entonces. «Menos uno...», se respondió desde el otro lado de la sala de espera, antes de entrar a plató. 

Barcala rechaza participar en el debate y en la entrevista electoral de INFORMACIÓN

Y es que Luis Barcala, alcalde y candidato a la reelección del PP, fue protagonista, aunque no estuvo presente en el debate al rechazar la invitación. Su espacio en la mesa se quedó vacío, su micrófono, sin colocar. Pese a todo, su imagen salió en pantalla, porque el aspirante de Compromís, Rafa Mas, enseñó un cuadro con una fotografía del «alcalde ausente». Fue una de las críticas más repetidas en el debate, sobre todo desde las fuerzas de izquierda, aunque Ciudadanos también lanzó alguna puya.

Menos activo estuvo el candidato naranja al hablar de pactos, ahí los más activos fueron los aspirantes de EU-Unidas Podemos y, de nuevo, el de Compromís. Vox admitió, por su parte, que solo podrá pactar con el PP. La socialista Ana Barceló prefirió no mirar a izquierda ni a derecha, eludiendo posibles alianzas pese al guante que le lanzaron sus exsocios del tripartito. Prefirió aprovechar ese tiempo en poner en valor la gestión del presidente de la Generalitat y candidato a la reelección, Ximo Puig. De su rival, Carlos Mazón, nadie habló. No estaba Barcala para defender su propuesta.