El agua es un elemento esencial del desarrollo sostenible. Los recursos hídricos, y la gama de servicios que prestan, juegan un papel clave en la reducción de la pobreza, el crecimiento económico y la sostenibilidad ambiental.

El agua propicia el bienestar de la población y el crecimiento inclusivo, y tiene un impacto positivo en la vida de miles de millones de personas, al incidir en cuestiones que afectan a la seguridad alimentaria y energética, a la salud humana y al medio ambiente.

El Día Mundial del Agua se celebra anualmente el 22 de marzo como un medio de llamar la atención sobre la importancia del agua y la defensa de la gestión sostenible de los recursos de agua dulce.

Lema 2019, «No dejar a nadie atrás»

Cada año, el Día Mundial del Agua destaca un aspecto particular relacionado con el agua y que corresponde a un desafío actual o futuro. El lema de 2019 es «No dejar a nadie atrás». Se trata de una adaptación de la promesa central de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible: todo el mundo debe beneficiarse del progreso del desarrollo sostenible.

Una de las metas del Objetivo 6 de Desarrollo Sostenible (ODS 6) consiste en garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos de aquí a 2030. Por definición, eso significa no dejar a nadie atrás.

Proyectos de Hidraqua

Lucas Jiménez, Presidente de SCRATS

Inversiones del Consorcio de la Marina Baja

Global Omnium: Gestión inteligente

Mancomunidad de los Canales del Taibilla

Eladio Aniorte, Presidente de ASAJA

Ángel Urbina, Presidente del S.A.T San Enrique

Hoy en día millones de personas viven todavía sin agua potable -en el hogar, la escuela, el lugar de trabajo, la granja, la fábrica- y luchan por sobrevivir y prosperar.

Para no dejar a nadie atrás, debemos concentrar nuestros esfuerzos en incluir a las personas que han sido ignoradas. Los servicios de abastecimiento de agua deben satisfacer las necesidades de los grupos marginados y sus voces deben ser tenidas en cuenta en los procesos de adopción de decisiones.

En los marcos normativos y jurídicos debe reconocerse el derecho de todos al agua, y debe proporcionarse financiación suficiente, de forma equitativa y efectiva, para los que más la necesitan.

  1. Unos 2.100 millones de personas viven sin agua potable en sus hogares
  2. Una de cada cuatro escuelas primarias en todo el mundo carece de abastecimiento de agua potable, y los alumnos consumen agua de fuentes no protegidas o pasan sed
  3. Más de 700 niños menores de cinco años mueren todos los días de diarrea, a causa del agua insalubre o un saneamiento deficiente
  4. El 80% de las personas del mundo que tienen que usar fuentes de agua no seguras o no protegidas vive en las zonas rurales
  5. En ocho de cada diez hogares de los que carecen de agua, las mujeres y niñas son las encargadas de recogerla
  1. 68,5 millones de personas que se han visto obligadas a huir de sus hogares tienen problemas para acceder al abastecimiento de agua potable
  2. Unos 159 millones recogen el agua potable de fuentes de agua superficial (estanques y arroyos)
  3. Unos 4.000 millones de personas —casi dos tercios de la población mundial— padecen escasez grave de agua durante al menos un mes al año
  4. 700 millones de personas en el mundo podrían verse forzadas a desplazarse debido a la escasez de agua de aquí a 2030
  5. Los más ricos suelen recibir servicios de agua, saneamiento e higiene de calidad a un coste bajo, mientras que los más pobres pagan un precio mucho más alto por un servicio de igual o menor calidad

Fuente: Naciones Unidas