La cereza de la montaña de Alicante se ha convertido en una fruta que nos deleita con su sabor especial. Se trata de una fruta con personalidad propia cuyas propiedades aportan numerosos beneficios, todos ellos relacionados con la mejora de la salud y el bienestar.

Es uno de los cultivos tradicionales en la parte norte de la provincia de Alicante, nace en una de las áreas más singulares donde los paisajes con mayor relieve montañoso son los protagonistas y tienen unas características especiales debido al clima donde se cultivan entre 250 y 900 metros de altura.

La principal zona de producción está compuesta por los siguientes municipios de la provincia de Alicante: Vall de Gallinera, Planes, Benimarfull, Vall d’Alcalá, Almudaina, Ibi, Alcoy, Jijona, Muro de Alcoy, Penáguila, Benifallim y Villena, y de la provincia de Valencia: Onteniente y Bocairente.

Un color rojo rubí, una textura carnosa y un sabor especial. Estos son los aspectos que hacen que la cereza de la montaña de Alicante sea una fruta única. Las cerezas de la montaña de Alicante crecen en un microclima mediterráneo templado, de elevada pluviometría y con temperaturas frías en invierno y templadas en primavera. Estas características agroclimáticas provocan que la cereza sea más temprana, dando lugar a una fruta de características excepcionales. La producción media anual oscila entre 1.500.000 y 4.000.000 de kgs.

¿Pero, qué tipos de cerezas predominan? Las variedades predominantes amparadas por el Consejo son Burlat y Early Lory, como variedades más precoces, Prime Giant, Brooks y Stark Hardy Geant como variedad de mediana estación, además de Picota, Picota ambrunesa y Sweet Heart como variedad tardía.

Además, la fecha aproximada de recolección es de la segunda quincena de abril a finales de julio, aunque esta fecha varía ya que depende de las circunstancias climáticas.

Minuciosos controles de calidad

Las plantas de envasado asociadas al Consejo Regulador llevan a cabo minuciosos controles de calidad conforme a los procedimientos de CRIGP, el cual está acreditado por ENAC en la Norma ISO/IEC 17065 y es posteriormente cuando el Consejo Regulador, realiza exhaustivos controles de inspección y verificación para certificar y acreditar la calidad de una cereza ÚNICA.