Se mueve alrededor de Nels Coxman, el conductor de un quitanieves de la estación de esquí de Kehoe, en Colorado. Recién nombrado Ciudadano del Año por sus servicios para mantener las carreteras abiertas hacia la remota ciudad. La vida de Coxman rápidamente se mete, como vengador aficionado, en una espiral donde los cadáveres se cuentan a montones cuando su hijo (encarnado por Michael Richardson) resulta asesinado por equivocación por unos gánsteres locales tras un alijo de drogas extraviado. Todo cuanto sabe de asesinar a gente es lo que lee en una novela policiaca, pero Coxman se embarca pertrechado con un rifle de caza de cañones recortados e inconscientemente desencadena una serie de acontecimientos entre los que habrá una guerra territorial, aislados por la nieve, un secuestro, dos señores del crimen rivales, y una horda de matones con pintorescos apodos como Maverick, Mustang, o Smoke..

El director Hans Petter Moland y Liam Neeson se unen para un thriller dramático que mezcla la gélida venganza con el humor negro. «Es un remolino de venganza, violencia y humor negro», dijo Liam Neeson. «Es como abrir la caja de Pandora». Así define Neeson lo que su personaje desata en la ferozmente violenta y mordazmente hilarante Venganza bajo cero. «Mi personaje emprende el sendero de la venganza, pero no se da cuenta en qué se está metiendo» -dice Neeson-. «Cree que va tras el tipo que mató a su hijo. Pero en realidad todo se convierte en un remolino de venganza y violencia. Y todo adquiere un punto de humor negro que se extiende por el film, ¡por increíble que parezca!».

Las comparaciones con las películas clásicas de los hermanos Coen, Fargo en particular, reflejaron el buen recibimiento de Uno tras otro, el film noruego de 2014 de Hans Petter Moland que protagonizaba Stellan Skarsgard,con críticas elogiosas, y una taquilla internacional asombrosa. Otros aficionados establecieron paralelismos con la profundidad y los diálogos ingeniosos del primer Quentin Tarantino. Aunque si bien Moland está «obviamente encantado» de que su trabajo se haya comparado con esos dos referentes, él cree tener su propio estilo singular que se remonta a mucho antes, a un gran clásico de Hollywood. «Crecí admirando las películas de Billy Wilder -comenta el director-. Me encantaba su negrura y su humor ácido, ese equilibrio entre ambos. Así que cuando se me dio la oportunidad de realizar un remake de Uno tras otro, ahora en inglés [en contraposición a su noruego nativo del original], la tomé».

La idea de que fuera el propio Moland quien realizara el remake de su original la tuvo el productor Michael Shamberg, alguien que al haber producido cintas parejas como Pulp Fiction, Un romance muy peligroso y Cómo conquistar Hollywood, identifica un film policíaco innovador nada más verlo. «La mayor parte de mi carrera ha transcurrido trabajando con gente de singular talento -comenta Shamberg-. Cuando vi Uno tras otro, lo tenía todo. Y Venganza bajo cero es lo mismo. El público se implicará emocionalmente con los personajes, le agradará su condición de film de acción y se sorprenderá de lo divertida que resulta. Es una película en que ese equilibrio ha de ser el adecuado, y por ello debe ser Hans Petter quien la haga. Y en el centro de todo ello está el espléndido Liam Neeson».