A poco más de un mes para el final del año aún tenemos muchas oportunidades de mejorar nuestra fiscalidad. Aunque liquidemos la declaración de la renta entre abril y junio del próximo año, en ese momento no podemos hacer nada.

Si quieres ajustar el resultado debes aprovechar todas las oportunidades, empezando por revisar lo ya pagado, sus inversiones y los pros y contras de realizar operaciones de venta y, por supuesto, todas las posibilidades de deducción.

¿Qué he pagado hasta ahora?

Desde el mes de enero estamos pagando impuestos. En la nómina o en las facturas de muchos autónomos reflejan unas retenciones que son pagos a cuenta del IRPF. El objetivo de la Agencia Tributaria es que esta retención sea lo más exacta posible y por ello a primeros de año debemos rellenar el modelo 145 de Comunicación de Datos al Pagador en el que se señala sus circunstancias personales como si tienes deducción por compra de vivienda, número de hijos o discapacidad, entre otras. Estos datos personales junto a la cantidad que cobres determinan el porcentaje de retención.

Esto no quita que en muchos casos se produzcan modificaciones que alteren este porcentaje o que por circunstancias laborales haya cotizado menos, por ejemplo, concatenando contratos de pequeña duración a los que se le haya aplicado la retención mínima del 2%.

Modificar la retención al alza en estas últimas nóminas no influye en el resultado global, incluso financieramente supone que adelantas pagos, pero para muchos es preferible que desembolsarlo cuando hagas la declaración.

Aportación extraordinaria a planes de pensiones

Los planes de pensiones junto a otros productos análogos como los planes de jubilación o los planes de previsión asegurados (PPA) son actualmente la opción más importante de deducción en el IRPF.

Actualmente puedes restar de tus ingresos del trabajo o de actividades económicas o profesionales, si es eres autónomo, hasta 8.000 euros o el 30% de tus ingresos (la menor de estas). Por esto, lo primero que debes hacer antes de decidir si realizas o no una aportación es analizar si has llegado o no a este tope. Puedes aportar más, pero esta cantidad no concederá ningún beneficio fiscal.

También debes tener en cuenta que estas aportaciones no podrás disponer de ellas hasta al menos dentro de diez años o en caso de enfermedad o paro prolongado, o la edad de la jubilación si esta llega antes, por lo que solo deposita esa cantidad de dinero cuyo objetivo es ahorro a largo plazo.

Aprovecha el resto de las deducciones

Desde el 1 de enero de 2013 no hay deducción para los que adquieran una nueva vivienda habitual, pero son muchos los que las mantienen al haber adquirido una vivienda antes de esa fecha. Por ello, también es rentable si no has alcanzado el máximo de 9.040 euros por contribuyentes realizar una amortización parcial hasta esta cantidad que te permita deducirte un 15% de lo aportado.

Aquí no se agotan las deducciones. Las comunidades autónomas mantienen para su tramo del IRPF una larga lista de posibilidades que va desde gastos escolares, alquileres, rehabilitación de vivienda, etc. En este caso, tomando como referencia la guía del impuesto del año pasado, donde puedes ver las deducciones que se aplicaron en el IRPF del 2018 en tu comunidad autónoma comprueba que se mantengan, consulta si hay alguna nueva y sus requisitos.

Otro grupo de deducciones importantes son las de las de pagos sindicales, defensa jurídica contra el empleador, pagos a colegios profesionales y, especialmente, las donaciones a ONGs, fundaciones o cualquier entidad acogida a la Leyes estatal o forales de incentivos al mecenazgo. El requisito fundamental, además de su inclusión, es que siempre pidan un certificado con sus datos identificativos, fecha e importe donado. Podrás desgravar en el tramo estatal hasta un 75% de los primeros 150 euros donados y un 30% del resto de sus aportaciones. Este porcentaje se incrementa al 35% si la cantidad donada a una misma ONG no ha disminuido en los tres últimos años. También puedes deducirte un 10% por donativos a otras fundaciones y asociaciones declaradas de utilidad pública no acogidas a la Ley 49/2002.

Vender, compensar o traspasar en tus inversiones

También es muy importante prestar mucha atención a tus inversiones, especialmente si tienes minusvalías (pérdidas) que puedes utilizar para compensar ganancias. Para la declaración del año 2020, además de compensar las pérdidas patrimoniales con las ganancias patrimoniales del ejercicio y de los cuatro anteriores también se permite que el saldo negativo de ganancias y pérdidas patrimoniales se compensen con el saldo positivo de los rendimientos del capital mobiliario (depósitos, cuentas, letras del tesoro) y viceversa. El porcentaje de compensación estatal y en Navarra en este supuesto es de un 25%.

Aunque esta compensación la podemos realizar en todo tipo de activos sujetos a ganancias o pérdidas patrimoniales, los fondos de inversión nos proporcionan una posibilidad más. Si no queremos pagar impuestos este año sobre unas plusvalías latentes (sin vender) siempre podemos traspasarlo a otro producto con menor riesgo en el que consolidar la ganancia para vender posteriormente las participaciones que desee, cuando lo necesite o fiscalmente sea más adecuado.

Si eres autónomo, ¿gastar o no gastar?

Por último, si eres autónomo y tributas en estimación directa (no por módulos) también puedes tomar otra decisión que influye en tus impuestos: anticipar un gasto o dejarlo para el siguiente ejercicio. Si realizas más gastos este trimestre estos los restarás de tus ingresos y proporcionarán un beneficio menor y por tanto menos impuestos a pagar.

Por el contrario, si crees que por retenciones o pagos a cuenta efectuados o simplemente porque tus beneficios del ejercicio sean bajos y puedes permitirte demorar ese gasto, lo mejor fiscalmente será dejarlo para el siguiente ejercicio donde tendrá el mismo efecto.

Aunque queden pocos días para acabar el ejercicio, aún puedes tomar decisiones que influyan positivamente en tu declaración de la renta. Analiza tu situación fiscal hasta ahora y mira todas las posibilidades para mejorar tu fiscalidad.

Antonio Gallardo, experto financiero en iAhorro.com