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PILAR CORTÉS
Ver galería >La situación provocada por la expansión del covid-19 ha obligado a cambiar el formato habitual del congreso que anualmente celebra el Instituto de la Empresa Familiar, que acostumbra a reunir a representantes de este tipo de compañías de todo el país. Así, frente a la numerosa delegación que todos los años acostumbra a mandar la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante (Aefa), en esta ocasión tan sólo su presidenta, Maité Antón, se ha desplazado físicamente hasta Madrid, siguiendo las instrucciones de la organización para limitar el aforo.
La situación provocada por la expansión del covid-19 ha obligado a cambiar el formato habitual del congreso que anualmente celebra el Instituto de la Empresa Familiar, que acostumbra a reunir a representantes de este tipo de compañías de todo el país. Así, frente a la numerosa delegación que todos los años acostumbra a mandar la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante (Aefa), en esta ocasión tan sólo su presidenta, Maité Antón, se ha desplazado físicamente hasta Madrid, siguiendo las instrucciones de la organización para limitar el aforo.
La situación provocada por la expansión del covid-19 ha obligado a cambiar el formato habitual del congreso que anualmente celebra el Instituto de la Empresa Familiar, que acostumbra a reunir a representantes de este tipo de compañías de todo el país. Así, frente a la numerosa delegación que todos los años acostumbra a mandar la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante (Aefa), en esta ocasión tan sólo su presidenta, Maité Antón, se ha desplazado físicamente hasta Madrid, siguiendo las instrucciones de la organización para limitar el aforo.
La situación provocada por la expansión del covid-19 ha obligado a cambiar el formato habitual del congreso que anualmente celebra el Instituto de la Empresa Familiar, que acostumbra a reunir a representantes de este tipo de compañías de todo el país. Así, frente a la numerosa delegación que todos los años acostumbra a mandar la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante (Aefa), en esta ocasión tan sólo su presidenta, Maité Antón, se ha desplazado físicamente hasta Madrid, siguiendo las instrucciones de la organización para limitar el aforo.
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