El exjugador del Hércules y del Real Madrid, Royston Drenthe, que colgó las botas como profesional con tan sólo 29 años después de varias aventuras exóticas, ha repasado, en una entrevista con el diario Marca, su temporada como blanquiazul (2010/11), la última en la que el conjunto alicantino militó en la élite del fútbol español. El holandés ha vuelto a dejar claro que, en su opinión, los culpables del descenso a Segunda División A fueron los dirigentes al dejar de pagar en Navidad. Al igual que ahora, el consejo de administración de la entidad estaba controlado en aquella época por el empresario Enrique Ortiz.

«Empezamos genial. Hasta ganamos en el Camp Nou 0-2 y yo fui a la selección absoluta y todo. El problema fue que nos dejaron de pagar y dejé de ir a entrenarme», explica el exfutbolista holandés, de 30 años, que acaba de hacer pública su biografía en un libro. «¡Entonces me llamó Mourinho y me echó una bronca tremenda! Que yo era jugador del Real Madrid y no podía hacer eso, me dijo. ¡Pero joder, habría que verle a él si no le pagaban! El caso es que ahí se empezó a torcer todo. Me echaron a la gente encima y hasta los seguidores vinieron a mi casa a buscarme», declaró Drenthe a Marca.

En esa temporada 2010-11, el entrenador del Real Madrid era José Mourinho, que fue quien decidió su cesión al Hércules un año después de la llegada de Drenthe al club blanco con el alemán Bernd Schuster en el banquillo y con Raúl, Ramos, Van Nistelrooy, Benzema y Cristiano Ronaldo entre sus compañeros de vestuario.

Polémico y excéntrico como pocos futbolistas, el exjugador blanquiazul defiende también al extécnico del Hércules Esteban Vigo y carga con dureza contra Miroslav Djukic, que acabó ese curso como entrenador tras la destitución del preparador andaluz: «La culpa ahí la tuvo la directiva, que despidió a Vigo. Esteban era un entrenador magnífico. Pero le echaron y trajeron a Djukic, que sólo le preocupaba entrar en el vestuario para enseñarnos sus abdominales. Todavía se creía futbolista el tío. No me gustaba, la verdad. Y con él ya nos hundimos».

Su mala experiencia en el Hércules le terminó pasando factura la temporada siguiente en el Real Madrid. «Mourinho me apartó al llegar. No quería que acercara al equipo por lo que había hecho en Alicante. Y ahí estuve, entrenándome solo. Me sentí fatal. Un momento durísimo porque ahí sabía que se acababa mi carrera en el Madrid».

Nacido en Rotterdam en 1987, con 30 años recién cumplidos, Drenthe es padre de cuatro niñas y un niño. «Pues no sé si seré un gran padre, pero algo bueno tengo que tener, porque no te imaginas el cariño y el amor que me dan. Mi hijo y mis hijas son mi vida ahora mismo. Si ellos están felices a mí me da igual todo lo demás», declaró.

El exjugador holandés dejó varios detalles de su calidad en Alicante, como un gol de falta directa en el Rico Pérez a la Real Sociedad y otro en Anoeta tras una cabalgada en solitario. Sin embargo, es más recordado porque fue detenido a finales de octubre de 2010 tras saltarse seis semáforos en rojo y circular con su coche a 180 kilómetros por hora de madrugada por la avenida de Dénia.