El Real Murcia, del grupo IV de Segunda B, y el Reus, que ocupa puestos de descenso en Segunda, atraviesan sendas crisis económicas galopantes que provocarán la desbanda de buena parte de sus plantillas. Y el Hércules podría pescar en ese caladero siempre y cuando cuadren los números, algo a menudo complicado en el mercado de invierno.

El director deportivo Javier Portillo se interesó el pasado verano por varios jugadores que ahora militan en el Murcia y uno de ellos era el extremo Jesús Alfaro. La crisis económica e institucional del club pimentonero es de dimensiones enormes y los futbolistas sólo han cobrado hasta el momento media mensualidad de agosto. En ese vestuario, en el que milita Miñano y cuyo entrenador es Manolo Herrero, también destaca la presencia del delantero Aquino, quien podría haberse comprometido ya con el Cádiz según publicaron desde hace un par de semanas diferentes medios murcianos.

El panorama en el Reus, de Segunda, es aún peor ya que los jugadores no sólo no cobran, sino que la desaparición del club catalán está cada vez más cerca. "No puedo garantizar que el Reus acabe la temporada", aseguraba ayer el presidente de la Liga Javier Tebas. En la plantilla tarraconense hay varios jugadores interesantes, pero entre todos ellos destaca el veterano delantero Miguel Linares, que ha anotado tres goles hasta el momento y brilló con luz propia en el ascenso a Segunda del Oviedo (14/15) con 31 dianas.