El ex entrenador del Hércules, Jesús Muñoz, afirmó este lunes, minutos después de su destitución, que no ha podido dar con la tecla adecuada para hacer reaccionar al equipo alicantino, que se encuentra en zona de descenso a Tercera.

En su despedida, el técnico conquense, que ya no ha dirigido la sesión de hoy, quiso agradecer a los empleados del club, cuerpo técnico, jugadores y consejeros que le hayan facilitado el "privilegio" de entrenar al Hércules, al que deseó la mayor suerte deportiva para esta temporada.

Muñoz también elogió a la afición por seguir apoyando al equipo a pesar de su mala dinámica y recordó que llegó a Alicante hace tres meses "con la idea de cambiar la dinámica y de inculcar unos valores que se necesitaban".

"Al principio logramos cambiar ciertas sensaciones, pero no nos ha dado para estar en la zona en la que todo el mundo prevé que tiene que estar el Hércules", dijo en alusión a la lucha por el ascenso.

"Me he podido equivocar, pero no me arrepiento de ninguna de las decisiones porque las tomé desde la humildad y el convencimiento de que era lo mejor para el equipo, pero no di con la tecla adecuada", insistió el preparador.

Muñoz señaló el partido ante el Castellón como el momento en el que su equipo "volvió a caer" porque se dio cuenta de que no podría luchar por el ascenso. "A partir de ahí volvimos a perder las sensaciones", dijo.

El técnico deseó que el Hércules pueda salir de la zona de descenso y confió en que el club pueda reforzarse convenientemente en el mercado de invierno, periodo que señaló como un "punto de inflexión" para el "resurgir" del equipo.

Jesús Muñoz indicó que uno de los aspectos que le ha pasado factura al Hércules es señalar el campeonato de grupo como objetivo "desde el día después de no lograr el ascenso". "Ese mensaje ha podido mermar la confianza", dijo.

El exentrenador del Hércules, que vivía su primera experiencia como máximo responsable técnico, aseguró que no abandona la entidad con la sensación de haber fracasado.

"Fracaso hubiera sido no aceptar la propuesta. Me voy tranquilo, con la sensación de haber hecho todo lo que estaba en mi mano", explicó Muñoz, quien admitió haber vivido un "terremoto a diario" en el Hércules.

"Al final en el fútbol profesional los resultados mandan en todos los clubes. Y más cuando son negativos y los objetivos son tan ambiciosos", sentenció.