La pandemia avanza y lo devora todo a su paso, hasta el sueño cada vez más delirante de ver a tu equipo de fútbol desde la grada de un estadio. La Generalitat Valenciana notificó ayer al Hércules la prohibición de abrir las puertas al público en el próximo encuentro que los blanquiazules disputen como locales. De esta manera, el enfrentamiento con la Peña Deportiva será sin espectadores. Ya no tendrán acceso ni los cerca de 850 (en un campo con capacidad para 30.000) que asistieron al trepidante debut liguero del equipo de David Cubillo.
La restricción ordenada por Sanidad obedece al crecimiento exponencial de contagios que registra la provincia desde el pasado puente del 9 d’Octubre y que ha llevado a las UCI de algunos hospitales al límite de su capacidad, tal y como ocurre ya en Elche. El club había solicitado –antes de conocer esta resolución– que le permitieran usar un 50% del aforo del estadio, o, en su defecto, que le dejaran mantener la capacidad permitida en el estreno de la competición (1.000 personas), presentando para ello un estricto protocolo de seguridad sanitaria que, en teoría, no ponía en riesgo la salud de los asistentes.
Sin embargo, la Dirección General de Salud Pública y Adicciones terminó contestando a la solicitud presentada por el Hércules denegando la autorización de acceso de público al estadio y para ello se basó en el informe de la Subdirección General de Epidemiología, vigilancia de la Salud y Sanidad Ambiental, fechada el 27 de octubre, en el que se definía la situación epidemiológica de Alicante como «de alto riesgo para la celebración de eventos masivos».
Tras este dictamen, el Hércules informó a sus «abonados» de que el partido será retransmitido a través de la web del club de forma gratuita para los poseedores del denominado carné Compromiso (valorado en 50 euros) y por un importe de 7 euros para el resto.
El encuentro debía disputarse el 8 de noviembre, al mediodía y la fecha se mantiene... de momento; aunque sin apoyo desde la grada, algo que no ocurrirá en todos los campos de la categoría, lo que supone, como mínimo, un agravio competitivo al no repetirse las mismas condiciones de acceso en todos los terrenos de juego. El Hércules guardaba silencio ayer sin querer valorar la medida impuesta por el Consell.
FRENTE AL ALCOYANO, EL 15 DE NOVIEMBRE, A LAS CINCO
El Deportivo solicita a la Federación que le aplace también el encuentro ante el Villarreal B
Un día después de lo esperado, Competición resolvió que el encuentro correspondiente a la primera jornada de liga en Segunda B entre el Alcoyano y Hércules, pospuesto tras el positivo de dos futbolistas blanquiazules por coronavirus, se disputará finalmente el 15 de noviembre, domingo.
El equipo de la capital pidió esta moratoria debido a que, apenas 48 horas antes de la fecha programada, vencía la cuarentena de toda su plantilla, confinada por mandato de Sanidad, que no contempla en su protocolo de actuación el aislamiento selectivo, es decir, únicamente el de los infectados. La Federación Española especifica que se jugará a las cinco y que las dos partes están de acuerdo con la fecha y el horario.
Otra prórroga
Tras serle concedido el aplazamiento del choque frente al Ibiza, el Deportivo pide que se repita la fórmula con el encuentro que le mide con el Villarreal B. Para ello, el Alcoyano alega que si se respeta la cuarentena impuesta por Sanidad a todo el equipo tras detectarse un caso de covid, no tendría tiempo para preparar la visita a la ciudad al filial amarillo, fijada para 8 de noviembre. Apelan al precedente sentado con el aplazamiento del Alcoyano-Hércules por idénticas razones.
