Javier Acuña sufre una «fractura no desplazada en el tercio medio del peroné de la pierna derecha». Así lo ha confirmado el examen radiológico al que se ha sometido el delantero del Hércules esta mañana en la clínica Tesla. La resonancia magnética ha descartado la modalidad de fractura más grave, pero ha revelado una dolencia que puede tener al delantero paraguayo fuera de los terrenos de juego varios meses.

En el caso de los deportistas de élite, un tipo de lesión como esta puede requerir entre 8 y 12 semanas de rehabilitación, dependiendo de la evolución y de la reacción al tratamiento conservador. El club, en el parte médico oficial facilitado, no ha querido precisar el tiempo de recuperación estimado para la reaparición del Toro, no lo ha hecho con ninguno de sus futbolistas, pero los servicios médicos han descartado el paso el quirófano.

De momento, Acuña llevará un aplique para la sujeción de la zona dañada conocido como «walker» que deberá usar en lugar de su calzado habitual durante el primer mes de convalecencia. Una vez que se lo retiren, iniciará las cargas de trabajo específico para recuperar el tono muscular y cicatrizar la herida.

El nueve blanquiazul afronta, junto al resto de compañeros, un mes sin competición gracias al parón navideño. La liga no regresa hasta el 10 de enero y una cosa sí es segura, el ariete paraguayo del Hércules no llegará a tiempo de recibir a La Nucía, ese día, en el Rico Pérez. Hasta mediados de febrero, en el mejor de los supuestos, no volverá a jugar un partido oficial con el conjunto alicantino.