El incontestable triunfo del Hércules ante La Nucía (3-1) para abrir el año ha venido a dar la razón al entrenador David Cubillo en su apuesta por el «once» habitual con el que ha jugado la primera vuelta, plagado a causa de las lesiones de jugadores sub-23 y de teóricos suplentes cuando se diseñó la plantilla. Futbolistas como Javi Pérez, Teo Quintero, Jesús Alfaro, Borja Martínez, David Sánchez, Buenacasa y Manu Garrido son la guardia pretoriana de Cubillo y con su rendimiento se han hecho fuertes en la alineación titular. De modo que «primeros espadas» como Raúl Ruiz, Pedro Sánchez, Benja Martínez o Jon Erice, a priori indiscutibles, van a tener que ganarse el puesto tras sus respectivas lesiones, a la vista de la fuerte y saludable competencia que reina en el vestuario. El derbi del Rico Pérez con el que se cerró la primera vuelta deja también la imagen de un Hércules con diferentes registros, en este caso más preparado para ceder la posesión y hacer daño con la presión alta y el contragolpe, y las dificultades de dos «clásicos» como Pablo Íñiguez y Diego Benito para continuar en el proyecto: el defensa es desde hace tiempo el cuarto y último central del equipo y el centrocampista ni siquiera entró en la convocatoria.

ILUSTRES «SECUNDARIOS»

La hora de Javi Pérez, Teo Quintero, Alfaro, David Sánchez, Manu Garrido y Sergio Buenacasa

Si un equipo es un concurso de méritos y capacidad, como debe ser, no será fácil sacar del «once» inicial a jugadores como Javi Pérez, Jesús Alfaro, Borja, David Sánchez Buenacasa o Manu Garrido. Teóricamente enrolados en la segunda unidad del equipo cuando se confeccionó la plantilla, han dado la cara en la primera vuelta y han contribuido decisivamente a la mejora del Hércules cuando más apretaba la plaga de lesiones de compañeros llamados a marcar diferencias como Acuña, Pedro Sánchez, Benja, Raúl Ruiz, Jon Erice, Armando... El equipo ha aguantado el tipo, va claramente a más, y el técnico Cubillo apostó de nuevo por los jugadores habituales en este cierre de la primera vuelta. Y volvieron a darle la razón con una notable actuación coral e individual. La titularidad se ha puesto muy cara en este Hércules compensado y en una temporada con nuevo sistema de competición que penaliza mucho los empates y derrotas y no deja margen para probaturas, ni experimentos. El que mejor está es el que juega. Sin mirar los galones, ni politiquear en la pizarra del vestuario. Desde el banquillo también cumplió con nota el central Teo Quintero para cubrir la baja de Moisés García y aportó sus minutos de calidad otro sub-23, David Sánchez, que tiene más rango de titular que otra cosa y si no jugó de inicio fue, seguramente, por su confinamiento voluntario tras estar en contacto con un positivo por covid.

PREMIO AL TRABAJO

Los goles de los dos delanteros y el momento estelar de Borja

Ausente por lesión el Toro Acuña y con Benja ya recuperado de su operación de hombro, Cubillo alineó en punta a los dos «9» meritorios, Manu Garrido y Sergio Buenacasa, y ambos protagonizaron su mejor partido como blanquiazules. El primero abrió la cuenta a centro de Borja en otro ejercicio de fe del ariete, que en la segunda parte remató al palo tras un robo suyo, y Buenacasa asistió a Borja en el 2-0 y cuatro minutos después anotó el tercero como premio a su trabajo en la presión. El entrenador estaba especialmente contento por los tantos de ambos -«el contrato de un delantero se rige por los goles», dijo-, que son los primeros que trabajan a destajo en la fase defensiva del grupo. Manu y Sergio suman ya dos dianas en la Liga, las mismas que el extremo alicantino Borja Martínez, otro de los grandes destacados del partido y artífice de este buen momento del conjunto blanquiazul. Ya firmó el gol del importante triunfo en el último partido de 2020 ante el Atlético Levante (0-1) y el domingo asistió en el primer tanto, anotó el segundo en una definición exquisita ante el portero Fornés y rozó el cuarto. Rápido, intenso y desequilibrante por la banda izquierda y a balón parado, el futbolista de San Blas ha recuperado su mejor versión.

NUEVO REGISTRO DEL EQUIPO

El Hércules de la efectividad y la alta intensidad en la presión

El primer partido de 2021 también ofreció una nueva versión, un nuevo registro del equipo: mucho más eficaz de cara a puerta y vertical a partir de su presión e intensidad en el bloque alto. A partir de su gran seguridad defensiva, no necesitó el Hércules bordar el fútbol para llevarse con autoridad el derbi. Si frente al Orihuela tuvo paciencia y pausa para jugar por fuera hasta encontrar los caminos del gol a base de toque y asociación, ante los de la Marina no le importó ceder el dominio y la posesión para resolver el choque con gran eficacia en el remate y el aprovechamiento de los errores del rival. Llevaban 29 partidos los blanquiazules sin anotar más de dos dianas y sus tres primeras llegadas al área del portero Fornés se convirtieron en gol el pasado domingo. Y bien pudieron llegar otros tres en la segunda mitad con un poco más de acierto de Garrido y del reincorporado Benja. De menos a más en la temporada, como es lógico, el equipo de Cubillo ya ha demostrado que puede llevar la iniciativa en el campo, que sabe madurar los partidos para apretar a partir de la hora de juego (como ante el Atlético Levante) y que está cómodo sin el control para sentenciar a la contra y con la presión adelantada.