Falta de ambición para salir a ganar los partidos, de exigencia en el vestuario e incapacidad para rectificar y hacer evolucionar al equipo. El director deportivo del Hércules Carmelo del Pozo desgranó los motivos que le llevaron a prescindir del exentrenador David Cubillo tras la undécima jornada de Liga, al tiempo que recalcó su independencia de criterio para tomar una decisión que calificó de «necesaria» en una temporada más corta que nunca y con muy poco margen de error por el nuevo sistema de competición. Del Pozo recalca que ya en la segunda semana de noviembre, y en otras ocasiones posteriores, avisó a Cubillo de la «preocupación» reinante en el club por la falta de «fluidez ofensiva» y de protagonismo del Hércules y admite su inquietud por la pérdida del colchón de puntos del equipo con sus rivales directos por las tres primeras plazas. Y en cuanto al nuevo entrenador Alejandro Esteve, siempre lo tuvo en mente como posible recambio por su conocimiento al detalle de la plantilla.

FALTA DE REACCIÓN

La inacción de Cubillo le cuesta el puesto en una competición tan corta y tras varios avisos

«Cubillo es un buen entrenador y aquí ha hecho un buen inicio, pero entendíamos con el transcurso de las semanas que esa evolución tenía que ir a unos cambios que no se estaban produciendo y ya se había comentado durante varias semanas», explicó Del Pozo. «Y cuando los resultados no son positivos, entiendo que hay que tomar decisiones antes de que te quedes sin capacidad de solución más adelante en una competición tan corta como la de este año», añadió.

CONTRA EL CONFORMISMO

Pérdida de fuelle y de ventaja y poco gen ganador en el equipo

Del Pozo admite que el fulminante despido de Cubillo puede parecer una decisión arriesgada vista desde fuera, pero la consideró necesaria para inculcar una mayor mentalidad ganadora en este Hércules, más predispuesto a defender y a asegurar la portería a cero que a buscar el marco rival. «Vamos segundos, empatados con el tercero, a dos puntos del cuarto y a siete del quinto, que tiene dos partidos menos ante el último y el penúltimo. En las últimas jornadas nos han sacado puntos el Alcoyano, el Ibiza y otros equipos y con esta dinámica de resultados no quería llegar a los dos últimos partidos teniendo esa obligación de meterte entre los tres primeros con la necesidad de ganar», indicó. «Yo lo que quiero es que si eso sucede, que va a pasar, estemos preparados para ello; vas a necesitar ir a ganar y eso tienes que tenerlo entrenado y trabajado».

EL MALESTAR VIENE DE LEJOS

Sin injerencias de Ramírez y Cubillo avisado en noviembre

Del Pozo quitó hierro a las declaraciones de Cubillo en su despedida el martes, en las que atribuyó su despido al «cabreo» del accionista Juan Carlos Ramírez y subrayó su plena autonomía en la toma de decisiones en la parcela deportiva, al tiempo que recalcó que el extécnico ya estaba avisado del descontento en el club por la marcha del equipo desde el tercer partido ante la Peña Deportiva tras la raquítica victoria del Hércules en el Rico Pérez (1-0) el 8 de noviembre. «Cuando a un entrenador le cesan por primera vez, entiendo que la situación le descoloque», señaló. «Hubo conversaciones privadas en las que le hice ver que había gente enfadada, como lo estoy yo desde la cuarta jornada porque el equipo no me acaba de convencer. A mediados de noviembre comí con Cubillo y su agente y le transmití el paso adelante que debía dar el equipo. Está muy claro quién toma la decisión, al igual que las que se han adoptado en los cinco últimos meses. Se puede perder y empatar con el Atzeneta y el Alcoyano, pero no de la forma que se perdió y se empató, y no se puede decir lo que dijo en las ruedas de prensa posteriores», agregó el director deportivo en alusión a la falta de exigencia del exentrenador a la plantilla.

EL SENTIR DE LOS JUGADORES

Mensaje al vestuario de una mayor exigencia y ambición

«Los jugadores en este aspecto siempre son silenciosos y pausados; a algunos les habrá gustado más la idea al creer que tienen una nueva oportunidad y a otros menos», dijo sobre cómo ha recibido el vestuario el relevo. «A ellos sí que les he transmitido que estamos en un proyecto exigente y ambicioso. y ahora con el cambio vamos a intentar exigirles más en determinados aspectos. El jugador suele ir a favor de corriente».

LA SOLUCIÓN, EN CASA

Esteve conoce a toda la plantilla y el margen de mejora que tiene

El director deportivo tenía claro desde hace más de un mes que la primera opción en caso de recambio en el banquillo, como ha sucedido tras la undécima jornada de Liga, era Alejandro Esteve. De hecho, no han contactado con ningún otro técnico ni representante, pese a la lista de hasta 40 candidatos que podía barajar el club. «Ante una competición tan corta, a falta de siete jornadas [para el final de la primera fase], Esteve conoce los pros y contras de todos los jugadores, lo que pueden mejorar, y entendimos que era el idóneo y que está capacitado. Tuvo probablemente ofertas de Segunda B en verano y entendió que era mejor para él estar de segundo en el Hércules».

PERFIL DEL NUEVO TÉCNICO

Curtido en las categorías duras y con un amplio aprendizaje

Y sobre el nuevo entrenador Alejandro Esteve, que se estrena en un banquillo profesional, Del Pozo destaca que ha ido creciendo «a través de las categorías difíciles como Tercera y Segunda B, que ha captado mucha información y conceptos de muy buenos entrenadores como Nacho González, Martí o Anquela». Con todo, el director deportivo avisa de que Esteve no tiene «una varita mágica» para cambiar la situación, «pero hay que intentar ir a ganar más los partidos, aunque también puedas perder, pero prefiero perder así que jugar a empatar de otra manera porque no me convence».