El mercado de invierno ha dejado una sensación fría en el entorno del Hércules. La tranquilidad que se había generado con el buen arranque en la competición se ha visto alterada por los últimos acontecimientos, creando un clima de incertidumbre que puede acrecentarse si no se logra ganar este domingo al Peña Deportiva. Todo apuntaba a que por primera vez en esta larga etapa en la Segunda B el cierre del mercado invernal iba a ser algo anecdótico tras el gran esfuerzo realizado este verano en la planificación deportiva por Carmelo del Pozo. Pero las cosas se han ido torciendo. Primero con la inesperada destitución de Cubillo y después con la elección para el cargo de su ayudante, Alejandro Esteve. Su debut arrojó luces y sombras y habrá que aguardar al domingo para disipar o acrecentar las dudas en este tramo decisivo de la primera fase de la competición en el que el equipo está obligado a quedar entre los tres primeros para entrar en la Segunda Pro y poder luchar por el ascenso al fútbol profesional.

Previamente salió del equipo Pablo Íñiguez, algo que entraba dentro de lo previsible al no haber contado con minutos esta temporada. Su relevo fue cuestión de días y llegó el portugués Romain Correia, que ocupa ficha del filial. Defensa por defensa. El siguiente movimiento se produjo tan solo unas horas después de perder ante el Atzeneta con la incorporación de Álex Martínez, un lateral izquierdo que llega con la misión de competir por el puesto con Nani. Su llegada supuso la marcha de Manny, que no entraba en los planes del equipo y apenas ha dispuesto de minutos.

La mayor sorpresa fue el último movimiento del Hércules en el último día del mercado, el traspaso de Pedro Torres al filial del Espanyol. La salida del canterano ha escocido a buena parte de la afición, pero la oferta del conjunto catalán era irrechazable para el canterano, que pidió su salida del Hércules para aprovechar esta oportunidad. Darren Sidoel cerró su llegada al conjunto blanquiazul unas horas antes del cierre del mercado.

Tres salidas y tres entradas más el cambio en el banquillo. Más actividad de la esperada en un mercado de invierno en el que el Hércules siempre ha estado activo en Segunda B. De cualquier modo, nada que ver con la infinidad de movimientos que tuvo que realizar el club el pasado año semanas antes de que la pandemia lo detuviera todo. Entraron seis fichajes (Raúl Ruiz, Perone, De Lerma, Sergio Jiménez, Vergos y Olavide) mientras que salieron ocho jugadores (Rulo, Samuel, Miranda, Borja Martínez, Alejandro Alfaro, Carlos Martínez, Olmedo y Alvarado). Pese a todo, el equipo siguió sin funcionar.

2019 fue un año de más tranquilidad. El conjunto blanquiazul sólo incorporó durante ese mes de enero a dos futbolistas (Jesús Alfaro y Jona Mejía), pero el esfuerzo económico fue mayor que el de las temporadas anteriores.

La dinámica positiva del equipo, que enlazó 17 jornadas consecutivas en ascenso y que comenzó el curso con cuatro victorias seguidas, fue suficiente para que los máximos accionistas del club dieran ese paso al frente que solicitaba el director deportivo, Javier Portillo, para apuntalar más el bloque. Por el camino se marcharon del Hércules el santapolero José Fran y el jienense Carlos Fernández.

En enero del año 2018, el primero de Portillo en solitario en la dirección deportiva del Hércules, llegaron a Alicante tres alicantinos (Paco Candela, José Fran y David Torres), pero su aportación de poco valió para revertir el rumbo de un equipo que engulló a tres entrenadores y que se quedó incluso fuera de los puestos que daban acceso a disputar la Copa del Rey. Tampoco le fue mucho mejor en la anterior campaña, una 16/17 en la que el Hércules también quedó fuera del «play-off» de ascenso y en cuyo mercado de invierno llegaron Lolo y Juan Delgado. Sí aportaron, sin embargo, los fichajes del mes de enero de la 15/16 Mainz, Javi Flores, Álvaro García e incluso Vivi. En el primer intento por salir de Segunda B en esta última etapa también dejó buen recuerdo el canario David González, que llegó a la vez que Indiano y Quero.

Ya con el mercado cerrado, el Hércules se centra en los seis partidos que quedan de la primera fase. Envuelto en dudas después de tres partidos sin ganar, debe logar los tres puntos ante el Peña Deportiva para evitar caer en una profunda depresión y ver peligrar su tercera plaza, algo que convertiría en un rotundo fracaso la temporada. Máxima atención, por tanto, al duelo de este domingo en césped artificial.

Moisés regresa el domingo y ocupará el puesto del sancionado Tano Bonnín

Moisés volverá este domingo al equipo tras varias semanas lesionado y ocupará el puesto del sancionado Tano, que vio la quinta tarjeta amarilla ante el Mestalla en el Rico Pérez. De esta forma, el eje de la defensa lo ocupará Teo y Moisés. La duda estará en si Esteve dará sus primeros minutos a Álex Martínez o esperará a que se ruede más con sus nuevos compañeros, ya que lleva un año sin jugar. El nuevo lateral izquierdo se incorporó ayer a los entrenamientos y no debería tardar en disputar sus primeros minutos como blanquiazul para aumentar la competencia. El conjunto balear ocupa la penúltima posición de la tabla y solo ha anotado tres goles después de 12 partidos, aunque su defensa es sólida y solo ha encajado siete goles, uno más que el Hércules. Solo vale la victoria en Santa Eulalia para reconducir la situación, ya que el equipo ha vuelto a encajar goles perdiendo la solidez defensiva que le estaba convirtiendo en uno de los mejores equipos de los 102 equipos de la Segunda División. El encuentro es clave.