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Cabeza Negra

Caro diario

Los jugadores del Hércules felicitan al central Carlos David después de la consecución del tanto de la victoria, ayer. | AFE / CARLA CORTÉS

He ido a renovar mi abono. Sí, ya sé que te dije que nunca más, pero ya ves, la cabra tira al Rico Pérez. Como cosa positiva te diré que por fin me han devuelto el importe de aquellos cinco partidos no disputados hace dos temporadas. Más vale tarde que nunca y, la verdad, no me ha venido mal, porque los abonos cuestan lo suyo. Hablo sobre todo del de mi hija que, con 14 años, ya tiene que pagar como un adulto. Al menos los dos pequeños, entran gratis. No sé qué haremos el año que viene, cuando mi hijo se convierta también en adulto con 13 años. Pero ya cruzaremos ese puente.

Claro, que podría ser peor, si fuéramos de tribuna no tendríamos derecho a ninguna rebaja. Por no hablar de los jubilados, a los que también les han dejado compuestos y sin descuento. ¿De verdad que esto lo ha propuesto el consejo?

En la cola, mientras me torraba al sol, me ha dado por fijarme en la gente con la que compartía la espera. Allí había desde veteranos de La Viña, que ya necesitan bastón para manejarse, a jóvenes nativos del Rico Pérez, orgullosos vistiendo los colores y atentos en todo momento a su móvil. Todo un abanico de edades y condiciones unidos por un sentimiento. Sinceramente, se me antoja un milagro cada uno de ellos. Que buena afición si tuviera buen señor.

Te diré que este año, la renovación del abono no es en el antepalco, desconozco los motivos, pero con tan solo dos taquillas abiertas y un proceso que no siempre es rápido, la cola se hace bastante dura a pleno sol. Daría mi número de socio por encontrarme con Ortiz y su puro, allí mismo, en esa cola durante quince minutos, no más, e inocentemente preguntarle: ¿Qué delito cometimos contra ti naciendo? Con lo que cuestan un puñado de abonos podrías pagar un par de taquilleros más y una carpa que haga sombra y endulce algo la espera. ¿Tanto te cuesta pensar en tu clientela?

Por cierto, no te puedo contar cómo es el carné de este año. De momento nos dan un resguardo y ¡tendremos que volver a por él en septiembre! Como ves, la vida sigue igual.

Bueno, te dejo. En breve, comenzará la temporada y abriremos «el melón» de la plantilla. Ya sabes que aquí, sobre el papel, todos los años tenemos un equipazo. Después vienen los ¡ay, mare! Ocho años ya en el infrafútbol.

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