La lista de bajas en el Hércules de cara a la temporada 2022/23 es tan amplia que se acaba mucho antes recopilando la de futbolista que seguirán defendiendo la camiseta blanquiazul el año siguiente al triste centenario en Segunda RFEF: Raúl Ruiz, Sandro Toscano y César Moreno. 

Por lo tanto, de momento son solo tres los jugadores del curso pasado que continúan en el proyecto presente, actualmente aún en fase inicial de construcción. 20 bajas que tendrán que ser sustituidas por otra veintena de futbolistas que llegarán al Hércules en verano con promesas de trabajo, orgullo por formar parte de una entidad histórica y deseos de crecer en una plaza como la herculana, pero que esta vez se espera no queden en cantos de sirena con el paso de los meses y el avance de la competición.

La revolución que deben llevar a cabo el director deportivo, Paco Peña, y el entrenador, Ángel Rodríguez, ambos nuevos también en sus puestos, es de proporciones mastodónticas. Desde el inicio de la caída a los infiernos del club alicantino, con el descenso a Segunda División en 2011, no se había vivido algo igual. Para encontrar el espejo de lo que va a ser este verano en clave herculana habría que remontarse a la temporada 2006/07. Entonces, como ahora, el club también dio 20 bajas. Eso sí, en el segundo escalón del balompié nacional y no en el cuarto.

Aquel verano, José Bordalás era el técnico del Hércules, tras haberse ganado la renovación por sus buenas prestaciones a su llegada al banquillo mediado el curso anterior. El posterior técnico de Elche, Alavés, Getafe y Valencia no se cortó a la hora de abrir puertas y ventanas del vestuario y cambiarlo casi por completo. Curiosamente, Sergio Mora formó parte de aquella salida masiva como futbolista. Ahora le ha ocurrido como entrenador.

A Mora le acompañaron Moso, Castro, Verdejo, Álvaro Cámara, Sisi, Dani Borreguero, Sergio Sánchez, De las Cuevas, Navarrete, Schmidt, Palacios, Toché, Carlitos, Manolo Pérez, Kiko Ratón, Patri, Dani Tortolero, Carlos Pérez y el canterano Sergio Martínez. Pese a la cifra similar en salidas, la de jugadores que permanecieron fue algo más alta que en la actualidad: Redondo, Sergio Fernández, Turiel, Moisés, Kike Mateo, Urbano y Schiavi. Siete en total.

Ahora, el reto para Peña y Rodríguez es de altos vuelos. Al menos a ninguno de ellos le pillará de nuevas. El director deportivo conoce el Hércules tras haber sido futbolista durante nueve temporada y el técnico viene de ascender a Primera RFEF. Por cierto, tras aquella revolución de 2006, Bordalás fue destituido en la séptima jornada y el club tuvo que echar mano de Paquito Escudero en las últimas cinco jornadas para evitar el descenso a Segunda B. Esta vez se espera que la historia sea diferente.