Partido complejo y escenario difícil. El Hércules visita el domingo el municipal Sagnier para medirse con el Prat, un equipo al que todavía no ha logrado imponerse en Liga. Las cuatro veces que ambos clubes se enfrentaron en Segunda B acabaron sin triunfo blanquiazul.
La superficie sintética que conforma el terreno de juego, renovada por última vez en 2013, es una de las dificultades a las que tienen que enfrentarse los rivales del cuadro catalán. El exceso de bote de la pelota y la reducción de las distancias por las medidas del recinto hacen muy difícil el aclimatamiento al escenario del partido que, por si eso fuera poco, se disputará a las doce del mediodía, un horario que ya le pasó factura al Hércules en su visita a Palma para enfrentarse al Mallorca B.
El fútbol de toque y circulación rápida que propone Ángel Rodríguez puede jugarle a favor al equipo alicantino si es capaz de rasear la pelota y no pecar del fútbol directo que preconizó este equipo en sus dos últimas visitas al municipio barcelonés.
En ambas, en 2017 y 2019, el Hércules y el Prat firmaron tablas después de anotar un tanto cada uno. En la primera, con Paco Peña como capitán, Fernando Román igualó la contienda a un minuto para el final. En la segunda, Benja, ahora en el Intercity, adelantó a los blanquiazules en el minuto 83, pero su gol, que parecía el del triunfo, lo contrarrestó Putxi al poco de sacar desde el centro del campo (85’).
El Hércules de Tevenet perdió en el Rico Pérez con el Prat (0-2) y el de Vicente Mir salvó un punto en Alicante (2-2) en el último precedente entre ambos conjuntos, hace ya casi tres años.
Los blanquiazules, que viajan el sábado a la Ciudad Condal, llegarán al choque con dos puntos y a cuatro de distancia del líder, el Espanyol B, su próximo rival en el Rico Pérez.
