¿El play-off es una opción para este Hércules?

Se ve tan cerca, que cuesta creer que en realidad siga muy lejos. Dos puntos separan al Hércules de la promoción de ascenso. Un partido. Ni siquiera el camino hacia allí parece difícil porque dos de los tres rivales a los que deben enfrentarse los alicantinos son muy asequibles: Alzira y CD Ibiza, ambos en descenso, los insulares virtualmente descendidos.

Dos citas en casa y una fuera. Cualquiera firmaría un final así, cualquiera que no hubiera visto jugar a su equipo como local en el José Rico Pérez, de donde se han esfumado 22 puntos esta temporada, más de la mitad con Lolo Escobar al frente del equipo (13). Con el extremeño en el banquillo se han perdido tres de los nueve encuentros que el Hércules ha disputado en su campo (Teruel, Mestalla y Olot) y se han empatado dos (Terrassa y Mallorca B). Hay que retrotraerse más de un mes para encontrar la celebración de un triunfo sobre el césped con la afición en pie. Desde el Día del Padre (19 de marzo), no suma los tres puntos el legítimo inquilino del Rico Pérez.

Los blanquiazules solo han ganado 6 de las 15 citas que han tenido en el Rico Pérez, de donde han volado 22 puntos

Ángel Rodríguez solo cayó una vez en Liga como local, la que le sentenció, la del «incendio» en los aledaños del palco que provocó la goleada del Lleida (0-4). También falló en la Copa del Rey, ante La Nucía, que también le acabó endosando cuatro al final de la prórroga (2-4).

La quinta plaza está tan barata en el grupo 3, que solo en él, en la situación actual del Hércules, puede albergar opciones de disputar la postemporada. En las otras cuatro divisiones de Segunda RFEF todos los que delimitan el «play-off» mejoran al Atlético Saguntino, que ahora mismo es el rival al que dar caza. Tiene 45 puntos, menos que el Compostela (50, en el grupo 1), el Gernika (49, en el G-2), el UCAM (50 en el G-3), y el Villanovense (48, en el G-5).

El Hércules actual está aún peor que el de la temporada pasada, que ya acabó el curso de manera muy pobre, con unos resultados desastrosos. Sergio Mora sumaba 51 puntos a estas alturas de curso, 8 más que Escobar.

Los cinco trabajos del Hércules (88-93)

Pero de todos los datos que alejan al equipo alicantino de la promoción de ascenso, el más desalentador es el de la cifra de victorias consecutivas. Los blanquiazules están «condenados» a ganar las tres fechas que le restan para asegurarse la fase regular, un hito que no se dado en la presente campaña. El técnico leonés, solo una vez, enlazó dos victorias (Prat y Espanyol B, al principio del curso) y el de Don Benito en dos oportunidades sumó seis puntos de una tacada (Saguntino y CD Ibiza, la primera; y Badalona y Prat, después).

De los tres triunfos que ha de lograr el Hércules hasta el final, el primero, con el Alzira en casa, es innegociable. De él depende todo lo demás. La 32ª jornada depara tres duelos trascendentes: Espanyol B-Manresa, Mestalla-Saguntino, ambos el sábado, y Prat-Terrassa, el domingo, paralelo al choque en el Rico Pérez (18 horas). Si los blanquiazules se deshacen de un bloque en descenso, es probable que alguno de los demás resultados del fin de semana le puedan beneficiar. Dos los conocerá cuando salte al césped, para bien o para mal.

Si acaba con el mes de sequía de triunfos en su estadio esta semana, afrontará de otra manera el que está llamado a ser el compromiso clave, el siguiente, contra uno de los clubes más en forma del grupo en la segunda vuelta, el Saguntino. Pero para que eso sea así, hay que imponerse al Alzira.