Calles atestadas de gente, hoteles llenos, restaurantes a rebosar y autobuses, trenes y tranvías hasta la bandera. Desde el Patronato Municipal de Turismo estiman que en esta edición más 1,3 millones de personas, entre alicantinos, visitantes de la provincia y turistas de otros puntos de España y del extranjero, han salido a la calle a disfrutar de las Hogueras y a consumir. Entre transporte, alojamientos, restaurantes, bares y compras, desde este departamento municipal calculan que en la semana de Hogueras se han movido en la ciudad más de 45 millones de euros. Una cifra que supera los 37 millones de euros que, según un estudio de la Universidad de Alicante, gastaron quienes visitaron la ciudad durante las Hogueras el año pasado.

El motivo del incremento radica en la mayor afluencia de personas en esta edición, por la coincidencia con el fin de semana y el enlace con los dos festivos, así como por la llegada masiva de viajeros en los trenes del AVE, ya consolidado, con más servicios durante las fiestas y trayectos más rápidos, según coinciden al apuntar desde las áreas municipales de Turismo y Seguridad Ciudadana, que prevé que el volumen de asistentes a las Hogueras alcance los dos millones de personas teniendo en cuenta los días grandes y la semana de fuegos artificiales en el Postiguet. El mayor pico de visitantes se registró durante toda la jornada del sábado y al mediodía del domingo, cuando las calles de la ciudad bullían de gente y los locales de hostelería estaban a rebosar.

Desde Turismo recuerdan que, durante estos días, los hoteles -con alrededor de 7.500 plazas- han estado llenos con una ocupación de entorno al 90% y a ellos se suman otras formas de alojamiento, como son las viviendas destinadas a segundas residencias que, según afirman, tienen capacidad para otras 250.000 personas. A este volumen de turistas se suman los ciudadanos del resto de la provincia que durante estos día, se han desplazado hasta la capital en coche, tranvía o autobús. Para hacerse una idea, bastaba con echar un vistazo a las estaciones del TRAM para ver la avalancha de pasajeros minutos antes del disparo de las mascletàs.

Esta aglomeración de visitantes así como de los propios alicantinos que han salido a la calle tienen su reflejo en la hostelería. «No sé si se pueden considerar, en terminos de negocio, las mejores de la historia, pero sí que se ha notado más alegría en la calle, incluso más que el año pasado, y para el sector de la hostería ha sido una pasada», comenta el vicepresidente de la Asociación Provincial de Hosteleros, Miguel García Navarro. Otros hosteleros, como María José San Román, constatan que las fiestas han supuesto un importante revulsivo para sus negocios. «El que hayan caído en fin de semana y los dos festivos de después han hecho que sean muy buenas, incluso mejor que el año pasado», señala.

Una situación ante la que los hosteleros resucitan, un año más, el debate sobre el traslado de las fechas de Hogueras de modo que todos los años caigan en fin de semana. En opinión de los hosteleros, el que la cremà de los monumentos se fijara un lunes les permitiría aprovechar la mayor afluencia de visitantes del fin de semana previo. «El sector reza para que las Hogueras caigan en fin de semana. La ciudad disfruta porque la gente no tiene que trabajar, la provincia nos visita y la hostelería sale beneficiada porque vende más», argumenta.

Sin embargo, el citado estudio de la Universidad de Alicante, elaborado por Instituto Universitario de Investigaciones Turísticas, refleja que si bien un 78% de los locales de hostelería estaría de acuerdo en trasladar el día de la cremà al domingo o al lunes posterior al 24 de junio, los asistentes a las Hogueras se oponen mayoritariamente (47%).

Para los comerciantes, la aglomeración de gente también ha tenido su efecto, como destaca el presidente del Colectivo de Comerciantes por Alicante, Domingo Martín, quien aclara que, si bien ha habido un mayor consumo, «no ha sido desbordante».

Pese a la dificultad de extraer datos concretos y a falta de un balance final de las Hogueras, tanto desde Turismo como desde Seguridad coinciden en que este año se ha superado ya el millón de visitantes de la edición pasada, lo que tiene su repercusión en el consumo. Según el estudio de la Universidad, el millón de alicantinos y turistas que salieron a la calle en las Hogueras de 2013 realizaron un gasto global de 37 millones de euros. Según Turismo, en los días grandes de Hogueras, que finalizan hoy con la cremà, habrán pasado por la ciudad 1,3 millones de personas, una cifra superior a la del año anterior que previsiblemente incrementará el volumen de consumo con respecto a la edición anterior en, al menos, ocho millones de euros.

El estudio realizado por la Universidad de Alicante es el único que, a fecha de hoy, ofrece un estudio indicativo del impacto de turístico que tienen las Hogueras. De ese estudio se desprende que del millón de personas que reunió la ciudad en la pasada edición, aproximadamente la mitad era gente que vivía, trabajaba o estudiaba en la ciudad y la otra mitad visitantes. De estos últimos, un 54% procedían de otras provincias españolas, sobre todo de Valencia, Madrid, Castilla-La Mancha y Castilla y León. Un 35% procedía de otras localidades de la provincia y un 10% del extranjero, principalmente de Reino Unido, Francia, Argelia y Bélgica. Se trata de datos que, según apuntan desde Turismo, pueden extrapolarse a las fiestas de este año, destacando la gran afluencia de personas de otros puntos de la provincia durante el fin de semana.

El 61% de los visitantes son turistas, es decir que pernoctan en la ciudad y el resto 38% excursionistas que visitan la ciudad por un día sin pernoctar. De quienes pernoctan, un 32% lo hace en hoteles, un 30% en casas de su propiedad y otro 27% en casas familiares. La estancia media es de 12 días.