Poco se notó ayer la falta de samba en el Desfile Folclórico Internacional. Y todo gracias a las estructuras móviles gigantes de la compañía alicantina Carros de Foc, que se convirtieron en las protagonistas del desfile más multitudinario de Hogueras.

La ausencia de las tradicionales mujeres brasileñas -tras la pérdida de un patrocinador- contaron en esta ocasión con un relevo de altura. El espectáculo que presentó Carros de Foc no defraudó a las miles de personas que se dieron cita a lo largo de un recorrido con inicio en Luceros y final en la plaza del Ayuntamiento. La propuesta de la empresa de San Vicente del Raspeig, que actúa por todo el mundo, incluía estructuras para todos los gustos, desde un caballo montado por una dulcinea hasta un gorila con malos humos. También participó Ángel, una marioneta gigante que dejó boquiabiertos a los más pequeños. Y como cierre, un esqueleto que parecía salido de los mares más profundos, con zombis que repartieron sustos entre los espectadores más despistados, cebándose con los niños. Con esta estructura se cerró un desfile que se prolongó algo más de una hora.

Antes del espectáculo de Carros de Foc, el desfile se nutrió con fiestas más conocidas, con amplia representación de la provincia. El Folclórico lo abrió carrozas con las Belleas del Foc y sus Damas de Honor, acompañadas por música tradicional y la Banda Municipal de Alicante. Tras ellas, aparecieron representantes de las fiestas de las Fallas de Valencia, la Magdalena de Castellón, la Huerta de Murcia y las Fallas de Burriana.

También formaron parte del desfile la Federación de Moros y Cristianos de Alicante y las Fiestas de Barrios de la ciudad. Luego fue el turno para la provincia, con Benejúzar al frente. A continuación, desfilaron Torrevieja, Pinoso, San Vicente, Hondón de las Nieves, Algueña y Aspe, todos los municipios con sus representantes festeras. Y algunos, como Pinoso, repartiendo dulces y vinos de su zona. Aunque este año, los productos típicos se vieron poco.

Este año, además de la ausencia de las brasileñas, se vieron contadas casas regionales. De hecho, tan sólo, aunque de una manera muy numerosa, desfiló Andalucía, con bailes, festeros de todas las edades e incluso caballos.

La representación internacional llegó de la mano de cuatro países hispanos: Ecuador, Bolivia, Colombia y Venezuela. Cada uno, ofreció danzas típicas, mostró trajes tradicionales y regaló sonrisas.

Pero, pese a todo, lo mejor se reservó para el final, con Carros de Foc. Sus estructuras gigantes, salpicadas con bailes y fuego, cerraron un Desfile Folclórico Internacional que echó poco de menos a una tradición ya casi instaurada en las Hogueras: la samba de las brasileñas como colofón a la fiesta. Ayer no hubo samba. Con los gigantes, tampoco se notó.