«Este año se cumple el 20 aniversario desde que monté mi primer taller y ahora estoy pensando más en hacer trabajos de decoración que hogueras porque se está haciendo complicado», afirma Jesús Grao, que pese a plantar en 2013 la Oficial del Ayuntamiento no recibió ningún contrato interesante para este año, lo que le ha creado cierto desánimo. «Tuve ofertas, y hablé con varias comisiones pero todos me pedían más de lo que podía ofrecer», relata. Es decir, contratos cada vez más a la baja de dinero, «y así es complicado». Según Grao, cada vez más hogueras buscan artistas en Valencia porque los pagos los pueden hacer a partir de marzo, «y aquí como tarde en enero tenemos que empezar a comprar materiales».

El artista, que ha plantado varias Hogueras Especiales y fallas a lo largo de su carrera, ha preferido este año pintar escenas para obras de compañeros como Pedro Abad, los hermanos Fonseca, Juan Carlos Asensi o Carlos Albaladejo que comprometerse con un proyecto que le pudiera acarrear problemas a su prestigio artístico. Por este motivo no se siente del todo en paro. «Cuando contratas un trabajo hay que terminarlo como se ha ofrecido. En veinte años no he fallado nunca a una comisión, quizá este año si hacía lo que me pedían habría fallado en alguna entrega. Muchas comisiones quieren caballo grande ande o no ande por poco dinero, y no quiero bajar la calidad que ofrezco en este taller. Prefiero cerrarlo antes que hacer una hoguera mal acabada. Me gusta crear monumentos limpios, con diseño, no solo llenar una plaza. Me ha costado ir subiendo mucho y mantenerme para que me digan que he hecho una marranada. Una cosa es la línea o el estilo, que puede gustar o no, porque te puedes equivocar al diseñar una hoguera, y otra cosa un trabajo mal acabado o un error a la hora de concebirla. Es distinto», explicó.

Grao tenía siete trabajadores a los que buscó otros talleres, «porque es gente que trabaja muy bien», puesto que no podía pagarles la Seguridad Social. Ahora se ha quedado con un empleado y su socio, lo mínimo para ganar un sueldo y mantener el taller. «Echamos una mano a otros compañeros, haciendo trabajos de decoración y escultura. Cuando vas de mercenario haces lo que te dicen, pintar, un poco de todo».

Antes que Grao se dio cuenta de la situación Joaquín Rubio, quien plantó Hogueras Especiales en Altozano, y Fallas Especiales en Valencia. Hace unos cinco años decidió cerrar el taller, vender las herramientas y dedicarse a pintar para otros. «Es mi fuerte, y personalmente me va mucho mejor de este modo. Me va bien pintando para artistas de Alicante y de Valencia». Así, este año ha colaborado con el equipo de Pedro Espadero para la Hoguera Oficial del Ayuntamiento, con Pere Baenas para la pintar la Hoguera Especial ganadora de Carolinas Altas, con Pedro Espadero, Carlos Simón, Carlos Sampedro, Paco Giner... «Tengo todo el año cubierto con trabajos de pintura. Tal y como está la situación no creo que vuelva a hacer hogueras y fallas. Ahora vas a una comisión y hay 50 personas presentando bocetos, cosas precarias, se bajan mucho los presupuestos, hay mucha competitividad y no es agradable. Hay que hacer pagos, los impuestos, empleados, materiales...Todo circula en torno al dinero y cuando te fallan los ingresos no puedes pagar. Prefiero ir, pintar y cobrar».