La Bellea del Foc y sus damas de honor: Cinco días de fuego para una vida de recuerdo

Las Hogueras 2025 se despiden en Alicante como lo hacen los grandes amores de verano: con la piel quemada por el sol, los ojos todavía húmedos por la emoción y el corazón lleno de momentos que no volverán, pero que tampoco se olvidarán. La Fiesta se apaga dejando tras de sí cinco días de fiesta, emoción y pólvora que quedarán grabados para siempre en la memoria de quienes las vivieron como sus máximas representantes. La Bellea del Foc, Adriana Vico, y sus seis damas de honor acaban de cerrar el capítulo más intenso de sus vidas. Atrás quedan los desfiles, las mascletás, las noches interminables y la emoción a flor de piel.

Ahora, con las voces gastadas, los pies aún doloridos y el corazón lleno, toca regresar poco a poco a la realidad. En el hotel que durante una semana fue su casa, las representantes del fuego recogían sus pertenencias entre risas, abrazos y alguna que otra lágrima contenida. El cansancio convivía con la emoción, y en cada rincón existía la certeza de que algo irrepetible acababa de terminar. Pero también la convicción de que lo vivido ha merecido cada segundo sin dormir.

La Bellea del Foc y sus damas de honor: Cinco días de fuego para toda una vida de recuerdo

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"Si nos dan más días, seguimos"

Y es que si algo ha sostenido a este grupo frente al cansancio ha sido la ilusión. Y eso lo tiene claro Adriana Vico, quien no duda en afirmar, junto a sus damas de honor, que todavía le quedaban fuerzas para más. "No estoy muy cansada, la verdad. Siempre lo digo, si nos dan unos días más, seguiríamos. Al final, aunque sean días intensos, sacamos la ilusión y la fuerza que tenemos para vivir con alegría nuestros días grandes porque es lo que llevamos esperando tanto tiempo", confiesa.

Vico destaca, sobre todo, la complicidad que ha nacido entre todas. "Hemos tirado mucho unas de otras, cuando una flojeaba, otra tiraba del carro. Lo que más destacaría es la unión que hemos hecho entre nosotras, con las niñas, con la Federació de Fogueres… y la forma en la que nos hemos acercado a los alicantinos. Esa conexión ha sido clave para disfrutarlo al máximo", destaca la Bellea del Foc.

Y aunque durante estas Hogueras ha vivido muchas las emociones, hay un momento que Adriana Vico guarda con especial cariño. "Una de las cosas más bonitas fue ver a mi madre vestida de alicantina en la Ofrenda de Flores. Hacía mucho tiempo que no se vestía y me emocionó muchísimo, fue todo un regalo de la Fiesta", afirma.

Emocionadas

Las damas de honor coinciden: están cansadas, pero felices. Claudia Aroca resume el sentimiento de sus compañeras: "Estamos muy bien, cansadas pero con muchísima emoción. Han sido días preciosos, hemos hecho cosas que nunca antes habíamos vivido, porque lo hemos visto todo desde otra perspectiva. El dolor de pies vale la pena por todo lo que hemos compartido", afirma.

Por su parte, Paula Nicolás, defiende que este cargo hay que vivirlo intensamente. "Creo que esta es la mejor forma posible de vivir la fiesta. La intensidad, esa energía que sale de no sabemos dónde, la unión entre nosotras y todos los momentos buenos que nos llevamos… es lo que hace que merezca tanto la pena", destaca.

"El cansancio estaba ahí, pero enseguida nos veníamos arriba", destaca Mireya Gaitán, para quien la emoción ha sido el motor que les ha dado alas para poder vivir una semana completa de Hogueras al máximo nivel. "Solo pensar en lo que teníamos por hacer nos motivaba. Es algo que se vive una vez en la vida, y no pesa el cuerpo cuando el alma está tan llena", indica.

Embajadoras

La experiencia, dicen, ha sido “única” y “especial”, pero también transformadora. Marta Lledó explica como el hecho de estar viviendo una experiencia "irrepetible" les ha hecho disfrutar de cada instante sin cansancio. "Han sido días muy intensos, pero llenos de ilusión. Durante los actos no se notaba el cansancio, lo sentías solo al sentarte, pero no nos dejaban venirnos abajo, ni nosotras ni la Federación. Hemos sido las embajadoras de la ciudad y eso lo hace todo más grande", asegura.

En esa línea, María Carrión describe las Hogueras 2025 como las mejores de su vida, esas en las que la felicidad ha superado con creces al cansancio. "Nos hemos contagiado de la ilusión y del buen rollo. Lo más emocionante ha sido el cariño con el que nos ha recibido la gente en cada rincón, en cada foguera, en cada barraca. Sin conocerte, te daban todo su afecto. Es algo que no se olvida", confiesa Carrión, quien tiene ganas de hacer balance: "Cuando llegue a casa y empiece a ver todo lo que hemos vivido, será cuando de verdad tome conciencia de lo que hemos hecho".

Pero si algo queda claro tras escuchar a todas las damas de honor y a la Bellea del Foc, es que el vínculo que han creado es irrompible. "Nos hemos acompañado en todo. En desfiles larguísimos, si a una le bajaba el ánimo, otra estaba ahí para animarla. Hemos sido un auténtico equipazo. Nos ha movido la emoción y la ilusión, y eso nos ha llevado a no notar tanto el cansancio", señala Lucía Gómez. Para ella, vivir las Hogueras desde dentro ha sido un privilegio. "Las mascletàs han sido brutales este año, de las mejores que recuerdo. Pero lo más especial ha sido sentir el calor de la gente, los aplausos al llegar a los actos… Alicante nos ha dado muchísimo".

Con las maletas cerradas, los trajes bien doblados y el silencio sustituyendo a la música de los últimos días, las representantes del fuego emprenden el regreso a casa. Comienzan a recuperar fuerzas y a asimilar todo lo vivido. Alicante las ha visto reír, desfilar, emocionarse y representar con orgullo a toda una ciudad. Y aunque la Fiesta haya terminado, queda algo que no se marcha: la certeza de haber sido parte esencial de un sueño que siempre arderá en el recuerdo.