Los investigadores que analizan el atentado contra el autobús del Borussia Dortmund sospechan que las tres bombas que estallaron al paso del vehículo fueron activadas por control remoto, según ha contado este viernes la Fiscalía Federal.

Los investigadores sospechan que los artefactos, que contenían esquirlas de metal, fueron activados a control remoto porque en el lugar del ataque la policía encontró una barrera de luz que pudo haber sido utilizada, según ha contado Frauke Köhler, la portavoz de la Fiscalía.

Las pericias se concentran ahora en esclarecer qué tipo de explosivo se utilizó, ha explicado la portavoz de la Fiscalía, antes de aclarar que las investigaciones de la Policía y de la Justicia siguen con máxima intensidad durante la Semana Santa.

Köhler ha dicho que no puede dar más detalles, manteniendo el hermetismo sobre las pistas que se están investigando.

Sin culpable hasta el momento

El jueves, la Fiscalía informó de que se habían desvanecido las sospechas sobre dos personas como presuntos autores o partícipes del atentado. Sin embargo, una de las dos personas, un iraquí de 26 años que había sido detenido poco después del ataque, sigue en prisión, con orden de detención por su presunta pertenencia al grupo terrorista Estado Islámico.

El ministro del Interior del estado de Renania del Norte Westfalia, donde se encuentra Dortmund, subrayó el jueves que los artefactos explosivos "fueron fabricados por profesionales".

Además, dijo tomar "muy en serio" la advertencia escrita en tres misivas encontradas en el lugar de las explosiones, que contenían amenazas de nuevos ataques. En ese contexto, Jäger no descartó que los responsables del ataque sean hinchas de fútbol violentos.

El martes, tres artefactos explosivos estallaron al paso del autobús que llevaba al plantel del Dortmund al estadio para disputar la ida de cuartos de final de la Liga de Campeones con el Mónaco. El partido fue aplazado y se jugó el miércoles, con una victoria del Mónaco por 2-3.

En el ataque resultaron heridos el jugador español Marc Bartra, defensa central del Dortmund, y un escolta policial.