El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió este viernes una dosis de ocho gramos del cóctel experimental de anticuerpos de la farmacéutica Regeneron y completó el tratamiento "sin incidentes" horas después de haber dado positivo por COVID-19, informó su médico en la Casa Blanca, Sean Conley.

"Esta tarde, el presidente sigue fatigado pero con buen estado de ánimo", añadió Conley en un comunicado.

La noticia de su positivo se hizo pública esta madrugada después de que Trump regresara a la Casa Blanca de un acto con donantes en su club de golf en Bedminster (Nueva Jersey), donde el mandatario entró en contacto con un centenar de personas.

Según el 'New York Times', Trump se mostró "letárgico", mientras que destacó que el miércoles por la noche se quedó dormido en el avión presidencial, el Air Force One, tras un mitin en Minesota.

Es posible, según fuentes consultadas por el diario, que el presidente comparezca por vídeo para tranquilizar a la población sobre su salud y demostrar que puede llevar a cabo sus funciones, pese a que se encuentra en cuarentena y bajo observación médica.

Trump anunció esta madrugada que él y su esposa habían dado positivo por coronavirus, y en un comunicado posterior, el médico presidencial, Sean Conley, dijo que ambos "están bien y planean permanecer en su hogar en la Casa Blanca durante la convalecencia".

Ambos se hicieron la prueba tras conocer el positivo de una asesora de la Casa Blanca, Hope Hicks, quien viajó varias veces esta semana a bordo del Air Force One junto a Trump, la última de ellas este miércoles a Minesota, donde el mandatario dio un mitin de campaña.

Medios estadounidenses informaron de que la asesora experimentó síntomas de coronavirus en el vuelo de vuelta desde Minesota a Washington, y fue puesta en cuarentena en el avión presidencial.

El vicepresidente, Mike Pence, y su esposa, Karen, se hicieron la prueba este viernes y dieron negativo, al igual que Barron, el hijo de 14 años de Trump y Melania, e Ivanka Trump y su esposo Jared Kushner, que trabajan muy cerca del mandatario.

Quien también ha dado también positivo de COVID-19 es la presidenta del Comité Nacional Republicano (RNC, secretariado), Ronna McDaniel, en una prueba a la que se sometió el pasado miércoles, según informó su oficina. McDaniel había estado con Trump en un acto de recaudación de fondos el viernes de la semana pasada.

Mantuvo su agenda

Además, Trump mantuvo su agenda del jueves en Bedminster (Nueva Jersey), donde participó en dos actos de campaña, pese a conocer que su asesora, Hope Hicks, había dado positivo por COVID-19.

El jefe de gabinete de Trump, Mark Meadows, dijo este viernes a los periodistas en la Casa Blanca que supieron del positivo de Hicks cuando el helicóptero del presidente estaba despegando el jueves en dirección a Bedminster. "Les puedo decir, sobre Hope Hicks, que descubrimos eso justo cuando el Marine One estaba despegando ayer, de hecho sacamos algunas personas que habían estado viajando y en contacto próximo", dijo Meadows.

"El motivo por el que se informó fue francamente que habíamos comenzado ya el rastreo de los contactos justo antes del evento. Como saben, anoche incluso en las primeras horas de esta mañana, desde el minuto en que tuvimos un test que confirmaba lo del presidente, sentimos que era importante que la noticia saliera en ese momento", subrayó.

La mañana del jueves, Trump no tuvo ningún acto programado después de que regresara la noche anterior de un mitin en Minnesota, un viaje que hizo también Hicks.

De acuerdo a medios de comunicación locales, Hicks fue apartada tras enfermarse del resto del personal de la Casa Blanca en el viaje de vuelta a Washington el miércoles por la noche, en el avión presidencial Air Force One.

El jueves, Trump abandonó la Casa Blanca después del mediodía, sin hacer declaraciones a la prensa, antes de subir a su helicóptero y trasladarse a Nueva Jersey.

Pese a conocer el positivo de Hicks, el mandatario participó en su club de golf en Bedminster (Nueva Jersey) en un panel con sus seguidores y en un acto posterior de recaudación de fondos con cientos de personas, hasta su regreso el mismo día a la capital de EE.UU.