Los partidos que formaban la antigua coalición de Gobierno en Italia, antes de que Matteo Renzi se retirara y provocara una crisis política, se mostraron este sábado de acuerdo en dialogar sobre un programa conjunto.

Se trata de un paso en el deshielo, después de las tensiones de los últimos días que obligaron el pasado martes a Giuseppe Conte a presentar su dimisión como primer ministro, tras constatar que su Ejecutivo estaba en minoría en el Senado italiano.

El presidente de la Cámara de los Diputados, Roberto Fico, inició este sábado las consultas con los antiguos socios de la coalición, es decir, el antisistema Movimiento 5 Estrellas (M5S), los progresistas Partido Demócrata (PD) y Libres e Iguales (LeU), y los centristas de Italia Viva, el partido de Renzi, para comprobar si es posible crear un nuevo Gobierno que dirija el país.

Fico ha recibido el encargo por parte del presidente de la República italiana, Sergio Mattarella, de sondear a estos partidos y a otros minoritarios, y referirá los resultados al jefe del Estado el próximo martes.

Este sábado el M5S y el PD se reunieron por separado con Fico pero coincidieron en su respaldo a Conte para dirigir un nuevo Ejecutivo y también en la necesidad de elaborar un pacto de fin de legislatura para evitar otra crisis antes de 2023, cuando el país tendrá que convocar elecciones generales.

Renzi recogió el testigo y dijo estar dispuesto a pactar un programa común, pero rechazó hablar de nombres y apoyar abiertamente a Conte.

Liderazgo de Conte

"Reiteramos que la elección de Conte como líder del Gobierno es indiscutible", dijo el jefe político del M5S, Vito Crimi, tras reunirse con el presidente de la Cámara.

"El PD reitera que Conte es la única figura capaz de aunar los apoyos necesarios", escribió el líder de esta formación, Nicola Zingaretti, en las redes sociales.

El partido antisistema también ha pedido que aparque la posibilidad de que Italia acuda al Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), el fondo de rescate de la Unión Europea (UE) al que se oponen por considerar que empobrecería a los italianos con la asunción de reglas de austeridad obsoletas.

"Pedimos que se dejen de lado algunos temas sobre los que no hay consenso, por ejemplo, el MEDE", subrayó Crimi.

Este es un asunto de discordia con Italia Viva pues Renzi ha reiterado en diversas ocasiones que este sistema es beneficioso para Italia con las reglas actuales, modificadas respecto a las de los peores años posteriores a la crisis de 2008.

En la rueda de prensa posterior al encuentro con Fico, Renzi señaló que "hay muchos elementos de discrepancia (con el resto de socios de la antigua coalición), uno de ellos es el MEDE", que daría a Italia "36.000 millones de euros (de Europa) para invertirlos en Sanidad".

Pero matizó: "Si el M5S es contrario, como siempre ha dicho, intentaremos comprender sus motivos".

Por su parte, Zingaretti, como líder del PD, sí entró en detalles sobre las cuestiones que debe incluir ese programa conjunto y citó una reforma tributaria que alivie la carga fiscal a las rentas bajas y medias, una reforma de la justicia que acelere los procesos y más inversión en sanidad, educación, infraestructuras e investigación.

Fondos europeos

Renzi también mencionó algunos de los puntos prioritarios para Italia Viva: mayor inversión en sanidad y educación, mejora de las infraestructuras y formación de los jóvenes para que puedan acceder a un mercado de trabajo que será cada vez más digitalizado.

Pero su mayor exigencia es que se gestionen correctamente los 209.000 millones de euros que corresponden a Italia de los fondos europeos de recuperación, motivo "oficial" que desató esta crisis.

"Italia Viva prefiere un Gobierno político a uno institucional. Pensamos que es fundamental no malgastar el dinero que la UE nos da y haremos de todo lo posible para lograr acuerdos", dijo.

Los medios italianos apuntan a que Renzi quiere salir reforzado de esta crisis y decidir quién dirige por ejemplo el equipo que gestiona la emergencia sanitaria en el país, además de hacerse con el Ministerio de Economía.

"Siempre hemos dicho que primero se debaten los temas y después los cargos. No es cuestión de qué ministerios va a tener Italia Viva, si el de Economía u otros. Primero los temas y después las carteras", se limitó a comentar el ex primer ministro.