El líder opositor ruso, Alexéi Navalni, ha vuelto a comparecer este viernes ante la Justicia de Rusia por segunda vez en una semana, en esta ocasión acusado de difamar a un veterano de la Segunda Guerra Mundial.

Navalni es acusado por publicar en su canal de Telegram en junio de 2020 un vídeo del veterano en el que éste defendía las enmiendas constitucionales promovidas por el presidente de Rusia, Vladímir Putin, con comentarios "falsos, que mancillan en honor y la dignidad del veterano", según el portal Meduza.

El opositor no reconoce su culpa.

El artículo del código penal que se le imputa prevé una multa de hasta un millón de rublos (13.000 dólares) o de hasta 240 horas de trabajos sociales.

La Justicia rusa ya le impuso este martes una pena de tres años y medio de prisión, al hacer efectiva una sentencia suspendida de 2014 en un juicio fue calificado de arbitrario por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

De la pena, se precisa en la sentencia, se descontarán los diez meses que Navalni permaneció en arresto domiciliario durante ese juicio.

El líder opositor ruso señaló durante la vista que este proceso es "una burla" del veterano, que tiene 95 años y participa por vídeo conferencia desde su casa. "No llegará con vida al final del proceso", afirmó, al preguntar por qué el anciano lleva puesta una mascarilla si está en su casa. "Es su derecho", respondió el juez.

Navalni afirmó que los familiares del veterano, a los que calificó de "fascistas y prostitutas políticas", "comercian con él para sacarle dinero y se burlan de él", según el canal de televisión Dozhd.

"Si le da un ataque al corazón ustedes serán los culpables", afirmó.

Los abogados del opositor llegaron tarde al proceso debido a los bloqueos establecidos por la Policía, que ha tomado medidas de seguridad extremas alrededor de la sede del Tribunal, ante la posibilidad de protestas de los partidarios de Navalni.

El opositor pidió al juez conversar a solas con sus abogados, solicitud que le fue concedida por el magistrado con cierta reticencia.

Al Tribunal también acudieron representantes diplomáticos de las embajadas de Francia y Gran Bretaña.

Tras la detención de Navalni, el 17 de enero a su regreso de Alemania, sus partidarios han convocado dos manifestaciones pacíficas en su apoyo en más de 140 ciudades, que han sido reprimidas violentamente por la policía y que se saldaron con más de 10.000 personas.

Solo durante la jornada del martes fueron detenidas más de 1.400 personas que salieron a protestar en contra de la condena del opositor.

Sin embargo, los partidarios de Navalni no tienen previsto hoy salir a las calles, después de que la víspera, el jefe de su equipo, Leonid Volkov, anunciase en Telegram que las convocatorias se postergan hasta la primavera y el verano boreales.