Israel ha lanzado este martes por la noche un nuevo ataque aéreo sobre la Franja de Gaza como respuesta a los al menos 20 incendios que se han producido en el sur de Israel provocados presuntamente por globos incendiarios lanzados desde el otro lado de la frontera israelí previamente a la Marcha de las Banderas.

El Ejército de Israel ha indicado en un su cuenta de Twitter que estos ataques han alcanzado objetivos militares del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) en el sur de la Franja y en Ciudad de Gaza. "Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) están preparadas para todos los escenarios, incluida la reanudación de las hostilidades, frente a los continuos actos terroristas de la Franja de Gaza", han apuntado.

La agencia oficial de noticias palestina Wafa también ha informado de que se han lanzado dos misiles sobre el sur de la Franja, y al menos uno en Ciudad de Gaza que han provocado daños materiales y, por ahora, no se ha informado de heridos.

El Servicio de Bomberos y Rescate israelí ha indicado previamente a la celebración de la Marcha de las Banderas, que se han producido al menos 20 incendios en el sur de Israel y que se dan después de que la unidad de globos incendiarios de Hamás anunciara la reanudación de sus operaciones tras la autorización para llevar a cabo la marcha. La controvertida marcha iba a tener lugar el 10 de mayo, si bien fue suspendida después de que Hamás disparara varios proyectiles contra la ciudad en respuesta a la represión de las manifestaciones contra los desalojos en Sheij Jarrá y la irrupción de agentes israelíes en la mezquita de Al Aqsa, el tercefranjar lugar más sagrado para los musulmanes. Estos incidentes derivaron en once días de combates en la Franja de Gaza, en los que murieron más de 250 palestinos y doce personas en Israel, entre ellas una mujer india y dos filipinos, así como más de 20 palestinos muertos a manos de las fuerzas de seguridad israelíes en Cisjordania.

En este contexto, y ante el temor a un posible aumento de las tensiones debido al recorrido de la misma, el Gobierno decidió volver a suspender la marcha la semana pasada, decisión que ha sido rechazada por la nueva formación, que decidió darle 'luz verde' llevando a Hamás a amenazar con posibles consecuencias.