El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está pidiendo a los gobiernos estatales y locales, que incentiven a los ciudadanos con 100 dólares (84 euros) para que avance el plan de vacunación, ha informado este jueves el Departamento del Tesoro a través de un comunicado.

"El presidente está pidiendo a los gobiernos estatales, territoriales y locales que proporcionen pagos de 100 dólares por cada estadounidense recién vacunado, como un incentivo adicional para aumentar las tasa de vacunación", explica el Tesoro.

"A lo largo de los esfuerzos de Estados Unidos en relación al plan de vacunación, hemos visto que los incentivos económicos sirven como factor de motivación para que algunas personas se vacunen", descubre la Casa Blanca.

Para ello, el Tesoro cuenta un plan de ayuda de 350.000 millones de dólares (294.000 millones de euros) para destinar a los gobiernos estatales y ha señalado que "se asociará con el Departamento de Salud y Servicios Humanos" para dsitribuir estos "fondos de manera efectiva" con vistas al avance de la vacunación.

"Sé que se está hablando sobre la libertad, pero con la libertad también llega la responsabilidad. Tu decisión de no vacunarte repercute en los demás. Por favor, vacúnate. Por tí. Por la gente que amas. Y por tu país", ha escrito en Twitter Biden.

"Para estos gobiernos y las comunidades que representan, ninguna tarea es más urgente que cambiar el rumbo de la pandemia, y no hay mejor herramienta que la vacunación. Es por eso que el Departamento del Tesoro está alentando "incentivos individuales" a quienes todavía recelan de la vacuna.

Ante este retraso del avance del plan de vacunación, el presidente Biden tiene previsto lanzar este jueves más directrices al respecto, como exigir haber sido inmunizado a todos aquellos que deseen incorporarse al Ejército, además de exigir a los empleados públicos que no hayan recibido aún la vacuna utilizar mascarilla de manera obligatoria y realizarse pruebas de coronavirus periódicas.

Así lo ha hecho saber la Casa Blanca en un último comunicado, en el que ha destacado una serie de "esfuerzos adicionales" para continuar con un plan de vacunación que hasta ahora ha dejado a 164 millones de ciudadanos completamente vacunados, incluyendo el 80 por ciento de las personas mayores y más del 60 por ciento de los adultos, según cifras de la Administración.

De la misma manera, el Gobierno reembolsará a las pequeñas y medianas empresas privadas las licencias que otorgan a sus empleados, además de a sus familias, para acudir a los centros de vacunación, y en un intento también para comenzar a vacunar a los niños de 12 años para que regresen cuanto antes a las escuelas.

Aproximadamente, el 70 por ciento de la población estadounidense ha recibido al menos una dosis de la vacuna contra el coronavirus. Sin embargo, el ritmo de las inyecciones se ha reducido en aproximadamente dos tercios desde abril, y la meta fijada por Biden de lograr para el 4 de julio que el 70 por ciento de la población esté completamente inmunizada no se ha logrado.

A medida que la variante delta se expande por Estados Unidos, la Administración Biden tiene que hacer frente a la baja aceptación de las vacunas entre los sectores más jóvenes de la población y en los estados más conservadores.