El jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, Mark Milley, ha advertido del "probable" desarrollo de una "guerra civil" en Afganistán, la cual conduciría a la "reconstitución de Al Qaeda o el crecimiento de Estado Islámico".

"Es probable que se desarrollen las condiciones de una guerra civil en Afganistán (...). No sé si los talibán van a consolidar el poder y establecer la gobernanza", ha apuntado Milley en una entrevista con el medio estaodunidense Fox News.

El general ha incidido en que la "gran probabilidad de una guerra civil amplia" conduciría a "condiciones que podrían llevar a la reconstitución de Al Qaeda o el crecimiento de Estados Islámico y otros grupos terroristas".

Afganistán fue el país que vio nacer Al Qaeda a finales de los años 80 y sirvió en dos ocasiones de refugio a su líder, Osama bin Laden, y a fecha de hoy seguiría cobijando a su actual 'número uno', Ayman al Zawahiri.

"Se podría ver un resurgimiento del terrorismo procedente de esa región en general dentro de doce, 24, 36 meses. Y vamos a monitorear eso", ha continuado Milley, para asumir el aumento de la dificultad para trabajar en materia de seguridad en la región ahora que Estados Unidos se ha retirado del país centroasiático.

Por otra parte, ha asegurado que Estados Unidos "continuará realizado operaciones de ataque" en caso de que existan amenazas para el país.

La advertencia de una "guerra civil" en Afganistán se produce mientras en el territorio se llevan a cabo intensos combates entre los talibán y el Frente Nacional de Resistencia afgano en la provincia de Panjshir.

La resistencia tiene ahí su bastión y hasta primera hora de este sábado ha negado que los talibán hayan tomado el control del territorio, si bien estos siguen afirmando avances en el mismo.

Uno de los portavoces de la insurgencia, Bilal Karimi, ha indicado, a través de su perfil de Twitter, que, hasta la mañana de este domingo, los talibán se habían hecho con "casi toda la provincia", "a excepción de los distritos de Roja y Bazarak". De acuerdo a estas afirmaciones, seis de los ocho distritos de la provincia estarían en manos de los insurgentes.

El viernes fuentes de los talibán afirmaron haber tomado la provincia de Panjshir, lo que desembocó en disparos de celebración en la capital afgana, Kabul, que dejaron unos 17 muertos, según informa la cadena Tolo.

Entonces, la resistencia desmintió la toma de la provincia, su bastión, y, ahora, los nuevos detalles aportados por los talibán confirman que los combates siguen.