El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha ordenado este sábado a su Ministerio de Asuntos Exteriores que declare ‘persona non grata’ a diez embajadores occidentales por haber publicado esta semana una texto conjunto en el que piden la libertad del filántropo, activista y opositor turco Osman Kavala. 

Kavala lleva en cárcel preventiva desde octubre de 2017 y es acusado, entre otros delitos, de “conspirar contra el Estado” y haber participado en el intento de golpe de Estado de 2016, algo que el opositor niega. De hecho, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha reclamado su libertad en más de una ocasión alegando que su prisión es “arbitraria e ilegal”Turquía, sin embargo, sigue reteniéndolo. 

Plazo determinado

“He hablado con el ministro de Asuntos Exteriores [Mevlüt Çavusoglu] y le he dicho: 'Trate de inmediato la declaración de estos diez embajadores como de personas 'no gratas''. "El día que no conozcan ni entiendan a Turquía, se marcharán de aquí”, ha dicho este sábado Erdogan en referencia a los embajadores de Francia, Canadá, Finlandia, Países Bajos, Dinamarca, Alemania, Nueva Zelanda, Noruega, Suecia y Estados Unidos.

Según la Convención de Viena de 1963, cuando un Estado declara como persona 'non grata’ al embajador de otro, el país que ha enviado dicho embajador debe retirarlo en un plazo determinado de tiempo. Si no logra hacerlo, entonces el país receptor puede, sin dar ningún motivo, expulsar a dicho embajador de su territorio.