Las autoridades kazajas extendieron hoy el estado de emergencia a todo el territorio nacional tras el incremento de los disturbios en Almaty y otras ciudades de Kazajistán, con la toma de sedes administrativas y servicios, vandalismo, violencia y hasta derribo de estatuas.

Según informó la agencia rusa TASS, esta medida sigue a la aprobada anteriormente por el presidente kazajo, Kasim-Yomart Tokáyev, quien decretó el estado de emergencia hasta el 19 de enero en las regiones de Mangystau y Almaty, así como en la propia ciudad de Almaty y Nur-Sultán

El presidente ha informado este miércoles de que se han registrado varios muertos, incluidos al menos diez policías, y múltiples heridos en el marco de las protestas registradas en varios puntos del país por el aumento del precio del gas licuado, por lo que ha pedido calma a la población.

En varias regiones del país continuaron hoy los disturbios y actos de vandalismo organizados por provocadores y elementos criminales. Para los ataques se utilizaron piedras, barras de acero, bates, mezclas inflamables", indicó el Ministerio del Interior.

Según el ministerio, los manifestantes atacaron sedes del Gobierno, servicios públicos, del comercio, la gastronomía y el sector bancario, así como ambulancias, vehículos de bomberos y bienes de ciudadanos comunes.

"Cientos de personas sufrieron el maltrato de la multitud enardecida, incluyendo aquellas que garantizan la conservación del orden y la protección de la salud de la población, incluyendo a 317 agentes de la policía y miembros de la Guardia Nacional", señaló el Ministerio del Interior, que lamentó además pérdidas humanas.

"Mano dura"

El presidente ha anunciado que habrá "mano dura" para los "elementos violentos que infrinjan las leyes" del país. "Como presidente tengo el deber de garantizar la seguridad y la tranquilidad de nuestros ciudadanos, velar por la integridad de Kazajistán", ha remarcado después de declarar el estado de emergencia en las zonas más afectadas y un toque de queda de 23.00 a 07.00.

El jefe de Estado ha aseverado a su vez que propondrá reformas del sistema político, pero no ha dado más detalles al respecto, si bien ha negado los rumores de que esté preparándose para abandonar el país. "Mi deber constitucional es quedarme con el pueblo. Juntos, pasaremos este capítulo de la historia de Kazajistán", ha afirmado en un comunicado de la Presidencia.

Sus comentarios tienen lugar después de que el Gobierno presentara su dimisión, una cuestión que no ha calmado las protestas. Para Tokayev, las manifestaciones constituyen una "conspiración" y se basan en un "complot" instigado para desestabilizar el país.

"La forma en que se coordinan los elementos violentos evidencia que existe un plan de acción de los conspiradores que están motivados por razones financieras", ha destacado.

Ataques contra un canal de televisión y derribo de estatuas

A lo largo de la jornada, un grupo de manifestantes ha asaltado la sede central del canal de televisión Mir en la ciudad de Almaty, donde han provocado varios destrozos, según el propio medio de comunicación.

"La sede de la Compañía interestatal de radio y televisión Mir en Almaty fue destrozada", ha indicado el canal en la red social Telegram. Los empleados han sido evacuados con la ayuda del Ayuntamiento y todos están a salvo, recoge la nota.

Horas antes, una turba de violentos manifestantes había tratado de irrumpir en el Ayuntamiento y la residencia del presidente, provocando un incendio. Vídeos difundidos por varios medios muestran las llamas extendiéndose por el edificio gubernamental y una gran columna de humo.

El Ejército habría acordonado la zona, si bien varios testigos han señalado que los manifestantes han logrado atravesar las barreras. Una de las residencias del presidente también habría sufrido un incendio.

Tokayev ha asegurado que ha ordenado que desciendan los precios del petróleo en la región de Mangistau, en el oeste del país, para recuperar la "estabilidad del país". Miles de personas llevan protestando desde el fin de semana, mientras que el director de la principal planta de procesamiento de gas ha sido arrestado acusado de intervenir en la fijación de precios.

El monumento erigido en honor al expresidente de Kazajistán, Nursultán Nazarbáyev, quien llevó las riendas del país desde su independencia hasta 2019, fue derribado hoy en la ciudad kazaja de Taldikorgán por manifestantes que protestan por el alza de los precios del gas en la nación centroasiática.

Reacciones internacionales

El Alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, ha matizado que el bloque se encuentra analizando la situación "de cerca" y ha hecho un llamamiento a los implicados a actuar "con responsabilidad y evitar cualquier acción que pueda llevar a una escalada de violencia".

"Reconocemos el derecho a la manifestación pacífica, pero esperamos que se evite cualquier acto de violencia. Además, pedimos a las autoridades que respeten este derecho fundamental y hagan uso de la fuerza de forma proporcionada a la hora de defender sus intereses legítimos en materia de seguridad", ha indicado en un comunicado.

Para Bruselas, Kazajistán es un "aliado importante", tal y como ha manifestado antes de solicitar que Nursultán actúe de acuerdo con el Derecho Internacional y respete la libertad de prensa y el acceso a información. Asimismo, ha recalcado la importancia de hallar una "solución pacífica con un diálogo inclusivo".

La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) ha hecho un llamamiento al diálogo en el país para frenar las protestas que sacuden el territorio desde el 2 de enero.

"Insto a rebajar la tensión y comenzar el diálogo en línea con los compromisos en el marco de la OSCE", ha expresado el presidente del organismo regional, el polaco Zbigniew Rau, a través de Twitter.

Poco antes, Rusia ha condenado la violencia registrada en el marco de las protestas y ha instado también a hallar una solución pacífica mediante el diálogo. Según Moscú, el presidente kazajo busca estabilizar la situación, por lo que ha defendido las medidas tomadas por el momento en las regiones más afectadas.