El Kremlin se ha negado este viernes a valorar la condena a nueve años de cárcel por posesión y tráfico de drogas contra la jugadora de baloncesto estadounidense Brittney Griner y ha avisado a Estados Unidos de que no aceptará ninguna negociación en público para intercambiar presos.

"Como empecemos a discutir matices sobre los intercambios en los medios de comunicación, estos canjes no van a ocurrir jamás", ha denunciado el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, quien ya ha acusado a Estados Unidos de "cometer ese error" al filtrar primero, y confirmar después, información sobre las conversaciones.

Estados Unidos, según informó Bloomberg a principios de mes citando fuentes próximas a las negociaciones, habría pedido a Rusia que liberara a Griner y al exmarine estadounidense Paul Whelan, condenado por espionaje, a cambio de devolver a Moscú al traficante de armas condenado Viktor Bout.

Este jueves, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, confirmó la existencia de una negociación al invitar a Rusia a aceptar una "oferta sustancial" de Washington a cambio de Griner y Whelan, aunque sin mencionar a Bout por nombre. Las fuentes de Bloomberg informaron en su momento que Moscú considera insuficiente el ofrecimiento de Estados Unidos.

Peskov ha condenado con insistencia esta forma de publicar las negociaciones. "De repente, a Estados Unidos le ha dado por resolver esta clase de temas a través de la 'diplomacia del megáfono' y así no se hacen las cosas, así que sin comentarios", ha zanjado Peskov en su comparecencia de este viernes, recogida por la agencia TASS.

El portavoz ha reiterado que Estados Unidos y Rusia tienen sus propios mecanismos privados de comunicación para tratar esta clase de temas y avisado por última vez que "cualquier comunicación pública amenaza con echar al traste" esta clase de canales.

Horas antes, el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, había mostrado exactamente esta misma postura. "Si los estadounidenses deciden volver a recurrir a la diplomacia pública y hacer declaraciones sobre tal o cual medida, es asunto suyo, pero me atrevería a decir incluso que ese es su problema", hizo saber el máximo diplomático ruso.

En las últimas horas también ha saltado a la palestra el nombre del ciudadano ruso Alexander Vinnik, detenido en Grecia en julio de 2017 a petición de Estados Unidos, que le acusa de lavar miles de millones de dólares a través del mercado de las criptomonedas.

Si bien Vinnik de momento no forma parte de las negociaciones, se encuentra ya en suelo norteamericano tras un traslado de urgencia desde Atenas realizado este pasado jueves a últimas hora de la tarde, según su abogado.

Vinnik también está acusado en Rusia de malversación y fraude informático por valor de unos 10 millones de euros, según informa TASS.