Siria también activa el mecanismo de protección civil y pide ayuda a la UE

El Gobierno de Siria también ha activado el mecanismo de protección civil y ha solicitado ayuda a la Unión Europea a raíz del terremoto sufrido el pasado lunes. Según ha confirmado el comisario responsable de gestión de crisis, Janez Lenarcic, la solicitud formal ha llegado este miércoles e incluye una “larga lista de elementos” para apoyar a los servicios de búsqueda y rescate de víctimas, desde equipos médicos hasta alimentos, que ya han transmitido a los Veintisiete y a otros países que participan en el mecanismo. “Pedimos a los Estados miembros y a otros estados a que den una respuesta favorable. Esta asistencia es para personas que lo necesitan y tiene que llegar a ellas”, ha insistido garantizando que velarán porque la ayuda no se desvíe y llegue a quien lo necesite.

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“No hay nada que pueda obstaculizar la entrega de ayuda humanitaria cuando se trata una situación de emergencia como esta”, ha añadido el responsable comunitario aludiendo al impedimento que podría suponer la política de sanciones aplicada por la UE contra Siria desde el año 2011. Lenarcic ha recordado que la situación humanitaria es, desde hace más de una década, “gravísima” y que tras el terremoto sufrido esta semana, que ha dejado más de 10.000 muertos en Turquía y en el país norteafricano, va a empeorar. 

Según Bruselas, antes del terremoto había unos 14,6 millones de personas que necesitaban ayuda en Siria y casi dos tercios de la población padece escasez de alimentos, algo que ha provocado también desplazamientos masivos. Al menos 6,9 millones de sirios son desplazados internos y más de 5,5 millones han huido del país. Según el Programa Mundial de Alimentos (PMA), en junio los precios de los alimentos eran un 45% más altos que en enero y casi se duplicaron en un año. Una situación que se ha visto agravada también por la invasión rusa de Ucrania.

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Sanciones desde 2011

La UE decidió imponer sanciones contra el Gobierno de Bashar al Asad en respuesta a la represión violenta sobre la población civil en 2011. En la lista de sancionados, según la última actualización del Consejo realizada a finales de diciembre, figuran 289 personas a las que se aplica tanto la inmovilización de activos como la prohibición de viajar a la UE así como 70 entidades a las que se aplica la inmovilización de activos. “Se acusa a la UE de que con sus sanciones está teniendo impacto en la ayuda humanitaria” pero “estas sanciones están ahí desde 2011 y se impusieron para responder a la represión violenta del gobierno sirio contra su población que había utilizado hasta armas químicas”, ha explicado Lenarcic.

Las medidas restrictivas, que han sido prolongadas hasta junio de 2023, incluyen la prohibición de importar petróleo, restricciones a determinadas inversiones, la inmovilización de los activos del banco central sirio mantenidos en la UE y restricciones a la exportación de equipos y tecnología que puedan ser utilizados para la represión interna, así como la prohibición de importar equipos y tecnología destinados a vigilar o interceptar las comunicaciones telefónicas o por internet así como la prohibición de exportar bienes de lujo a Siria.

Hasta ahora son 20 los Estados miembros, además de otros tres países de fuera de la UE, los que han ofrecido ayuda al mecanismo de protección civil. La oferta incluye “36 equipos de rescate y medicos que incluyen 1.500 personas, tanto responsables médicos como de rescate, y más de 1.000 perros de rescate que son especialmente importante en estas circunstancias”, ha detallado Lenarcic sobre una ayuda que ya han empezado a desplegar en Turquía en base a las peticiones cursadas por Ankara.