A sus 17 años, Andrea Briones sabe lo que es luchar para sacar un proyecto adelante. Su idea de poner en marcha un huerto en el colegio de l'Arenal de Xàbia no se hizo realidad de la noche a la mañana. En julio de 2012, el proyecto empezó a tomar cuerpo, ya que la fundación Colegios del Mundo Unido lo seleccionó para un programa de jóvenes emprendedores. Andrea convivió durante 15 días con otros chicos y chicas de distintas nacionalidades que también querían trabajar en beneficio de su comunidad. Luego presentó el proyecto de huerto escolar al director del colegio de l'Arenal. La acogida fue extraordinaria. La concejalía de Medio Ambiente limpió la parcela de 50 m2 donde los alumnos aprenderían a cultivar la tierra. "Además, logré financiación a través de la fundación Telefónica al quedar finalista del concurso Think Big", recuerda Andrea.

El proyecto empezaba a dar sus frutos (nunca mejor dicho). Esta joven de Xàbia de 17 años dio clases a 40 niños de 3ª de Primaria. "Se mostraron entusiasmados, deseosos de aprender". El huerto daba mucho de sí. "Les expliqué los beneficios de comer frutas y hortalizas y les animé a llevar una dieta sana y equilibrada". De los seis surcos que cultivaron, los alumnos recogieron alcachofas, tomates, brócolis, lechugas, acelgas y zanahorias. Lo primero que recolectaron fueron unas sabrosas fresas.

Tal fue el éxito de la iniciativa que, al final, se apuntó todo el colegio. Unos 260 alumnos, desde infantil a 6º de primaria, cultivaron 150 m2 de huerto escolar. "He aprendido y disfrutado mucho", reconoce Andrea, que subraya que "luchar por una idea y un proyecto" siempre recompensa. "A veces lo importante no es llegar a la cima, sino aprender durante el camino", reflexiona.