En las últimas semanas en Ayuntamiento de Calp ha detectado un aumento descontrolado de los depósitos de poda en el municipio por lo que se ha habilitado un servicio específico para la recogida de poda y su posterior traslado a la planta de tratamiento Campello a la que Calp pertenece según el plan zonal de residuos.

Según la normativa, sólo los particulares pueden depositar restos de poda junto a los contenedores de residuos habilitados por todo el municipio para su posterior recogida por la empresa adjudicataria del servicio de recogida de RSU. Sin embargo las empresas profesionales de jardinería tienen la obligación de depositar sus restos en un vertedero de gestor autorizado de podas, el más cercano tras el reciente cierre del Ecoparque de Denia es el de Campello.

Desde el Ayuntamiento, al tiempo que se refuerza el servicio de recogida de restos de poda, se recuerda a las empresas de jardinería la obligación de gestionar sus propias podas depositándolas en los lugares habilitados para ello. En el caso de que las empresas profesionales depositen restos de poda en la vía pública se enfrentan a una infracción grave de la ordenanza correspondiente con multas entre 151 y 600 euros.

Con todo, en el futuro el objetivo del Consistorio, tal y como indicó la alcaldesa en el pasado pleno, es que el triturado y tratamiento de la poda se realice en el municipio y pueda reutilizarse. De hecho, está previsto que en los próximos meses se licite y adjudique el servicio de recogida y tratamiento de residuos sólidos urbanos y el pliego ya contempla la creación de una planta para este uso.