El litoral de Dénia es un filón arqueológico sin fin. A los nuevos hallazgos, se suman los que se produjeron hace ya unos cuantos años pero que salen ahora a la luz a través de donaciones como la que ha efectuado Manuel Sánchez Valentín. Este vecino ha entregado al Museu de la Mar una colección de 81 cerámicas de barniz negro procedentes de la región italiana de Campania y de barniz interno rojo pompeyano. Están datadas en el siglo I a. C. Pertenecían a la carga secundaria de un gran navío que se hundió cuando estaba a punto de arribar a Dénia.

Manuel Sánchez Valentín es un gran aficionado a la pesca submarina. En 1980, durante una inmersión cerca de la escollera norte del puerto, encontró las cerámicas. En ese momento, ya depositó algunas en el Museo Arqueológico. Ahora ha donado 81 más. Cuarenta se conservan enteras. Estas vajillas eran la carga secundaria del barco, que transportaba en ánforas vino del golfo de Nápoles y aceite de Apulia.