Todos a la montaña. Cimas de la Marina Alta como el Montgó, el Penyal d'Ifac o la Serra d'Oltà son los fines de semana un hormiguear de senderistas que, en muchas ocasiones, no cumplen esa premisa básica de disfrutar de la montaña sin dejar huella. Dos históricos grupos excursionistas de la Marina Alta, el Centre Excursionista de Xàbia y el Grup de Muntanya de Calp, han detectado comportamientos incívicos en el Montgó y la Serra d'Oltà. El primero ha encontrado restos de dos fogatas que se han encendido en la cima del Montgó. La roca ennegrecida delata que se han prendido hogueras en un lugar en el que está terminantemente prohibido. El riesgo de incendio es enorme. Esta cumbre está permanentemente azotada por el viento y las pavesas de las fogatas pueden volar y prender en distintos puntos de la montaña protegida. Encender hogueras es una imprudencia inexplicable.
El Centre Excursionista de Xàbia también localizó este fin de semana restos de un botellón en el barranco de Santa Llúcia, donde se inicia la ascensión a la Plana y al Montgó.
La cima de la Serra d''Oltà, en Calp, tampoco escapa a la acción de los incívicos. Hay grupos de senderistas que conquistan esta cumbre y quieren dejar una firma indeleble y tremendamente incívica. Pintan e inscriben sus nombres en las rocas y en los postes de señalización. Lo llamativo es que firman como "montañeros", cuando la regla básica de quienes ascienden a la montaña es pasar sin dejar huella. El Grup de Muntanya de Calp ha recordado que colocó en esta cima un buzón y un libro para que los senderistas dejaran sus mensajes. Y ha instado a "disfrutar de la naturaleza dejando el mínimo rastro posible de nuestra visita".
