El aumento de los contagios está obligando a los pueblos a suspender sus fiestas o a reducirlas a actos en los que se pueda controlar el aforo. No hay procesiones. Son actos de mucho trajín y de apretarse.
El Poble Nou de Benitatxell es una excepción. Tendrá esta tarde, a partir de las 20 horas, procesión. La parroquia sacará la imagen de la patrona del municipio, Santa María Magdalena. El Arzobispado de València solicitó a la Subdelegación del Gobierno una autorización de "manifestación" para celebrar esta procesión. La Subdelegación ha dado su bendición. Y la parroquia ha animado a participar a través de carteles y mensajes de WhatsApp.
El alcalde, Miguel Ángel García, tuvo que realizar ayer un comunicado para evitar que detrás de la imagen procesionara hoy una nube de fervor. Aclaró que el ayuntamiento respeta "el derecho de manifestación de cualquier tipo". "Pero no nos gustaría que se produjera ningún incidente, especialmente con la delicada situación que vivimos ahora mismo con la covid-19".
El alcalde aclara que los actos de fiestas que se están realizando se atienen a un "control férreo del aforo". Los participantes se inscriben y aportan sus datos. "Pero en este caso (la procesión) no se puede garantizar dicho control", indica el munícipe.
El gobierno local apela a la responsabilidad de los vecinos y les "invita" a participar "de forma estática desde balcones, portales, aceras, plazas". Los concejales verán pasar la imagen delante del ayuntamiento.
El alcalde insiste en que las autoridades sanitarias desaconsejan los actos itinerantes. "Pedimos evitar aglomeraciones y respetar la distancia de seguridad de 1,5 metros, especialmente a la salida y la entrada de la Santa en la plaza de la Iglesia, cuya capacidad es bastante limitada", advierte Miguel Ángel García, que insta a los vecinos a honrar a la patrona sin desfilar.
