El nuevo Puerto Blanco será una realidad. La Dirección Provincial de Costas ha desbloqueado el proyecto para remodelar esta zona marítima de Calp tras más de un año paralizado. La actuación ha recibido el informe positivo y la autorización por parte de este departamento para el inicio de las obras que permitirán cambiar el aspecto de este área abandonada desde hace años.

Así lo ha desvelado el Ayuntamiento tras anunciarlo la empresa adjudicataria de la concesión para la construcción y explotación de esta zona de amarres, Marina PortBlanc. Las obras deberían de haber empezado en 2021 para inaugurar el nuevo puerto en el verano de 2022 pero fueron paralizadas por un problema de lindes entre las administraciones, según fuentes municipales. Es ahora cuando Costas ha dado el visto bueno a las modificaciones de las líneas de adscripción que el propio Ministerio de Transición Ecológica solicitó.

Por tanto, el comienzo de los trabajos podrá tener lugar en los "próximos meses", según la propia empresa, algo que "nos produce una gran satisfacción y entusiasmo, como empresa concesionaria del proyecto. Esperamos poder empezar lo antes posible", han señalado.

Está previsto que la empresa invierta 5 millones de euros en el proyecto con el que se llevarán a cabo obras tanto de urbanización, como de edificación y portuarias. El nuevo Puerto Blanco, que cambiará de nombre, albergará unos 200 amarres entre motos de agua y embarcaciones de hasta 15 metros de eslora, aparcamientos, restaurantes y zona de ocio.

"Será un nuevo puerto boutique ubicado en Calp, donde se podrá disfrutar de mucho más que un amarre, un lugar en el que vivir maravillosas experiencias junto al mar", señalaron desde la empresa que ha destacado su apuesta por las energías renovables y por material reutilizable en la ejecución del proyecto.

La alcaldesa de Calp, Ana Sala, manifestó que se trata de una "gran noticia" y lamentó el retraso en la ejecución de este proyecto en especial por el "avanzado estado de deterioro del puerto" Una situación que se dio por la "falta de mantenimiento por incumplimiento de las condiciones de los anteriores concesionarios y posteriormente por su abandono a la espera de que la nueva concesión fuera adjudicada". La alcaldesa añadió que "se trata de un enclave muy importante para Calp, que no merece encontrarse en semejante estado".

Cabe recordar que la mercantil logró la concesión de esta zona por parte de la Generalitat en diciembre de 2020 y pretendía rehabilitar este área marítima para mejorar tanto el aspecto como los servicios. Recibió el visto bueno de la Conselleria de Obras Públicas y el Ayuntamiento de Calp pero se topó con las trabas puestas por Costas.

El puerto deportivo contaba con 110 amarres y una superficie en tierra de 7.800 metros cuadrados con una lámina de agua de 11.000 m2. El Consell lo ha precintado en dos ocasiones, en 2007 y en 2016 (antes desalojó a las concesionarias). La nueva concesión es por 30 años.